El PP sigue dando sorpresas en el capítulo electoral de inmigración. Además del controvertido contrato de integración, defiende un nuevo sistema de visados y permisos de trabajo basado en el concurso por puntos. Según el modelo conservador, obtendrían más puntos los provenientes de países “con vínculos históricos o preferenciales” con España, además de los que cuenten con una formación “que pueda ser importante” para el mercado laboral. El responsable del programa electoral popular, Juan Costa, añadió que también apostarán por “visados especiales” para extranjeros con un alto nivel de cualificación profesional.

PROHIBICIÓN DEL VELO POR LEY
El programa incluirá asimismo una propuesta de reforma de la ley de igualdad para prohibir el uso del velo islámico en las escuelas, por entender que conlleva desigualdad entre el hombre y la mujer. Lo paradójico es que esta iniciativa en pro de la igualdad tendrá excepciones territoriales, ya que los centros escolares de determinadas áreas geográficas podrán aceptar que sus alumnas lleven el velo atendiendo a la “realidad local”. El dirigente popular habló de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla donde, según su criterio, esta prenda no esconde discriminación. “¿Quién decidirá que una niña es discriminada respecto a sus compañeros si lleva el velo y otra, residente en Ceuta o Melilla, no lo es?, ¿no se favorecerá a una frente a otra?”, se le preguntó. Costa eludió responder directamente a estas cuestiones.

AVENTURISMO
Ante esto, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, acusó al PP de crear problemas donde no los hay, enmarcando las propuestas en el “aventurismo político en el que está inmerso Mariano Rajoy”. Los socialistas insisten en la supuesta derechización del PP. Por eso, y aunque los populares insisten en que sus medidas se inspiran en Francia u otros países europeos, De la Vega afirmó que no hay ningún partido conservador que defienda esas tesis y criticó al PP por “ensalzar el racismo y la xenofobia” en busca de crispación. .