El presidente del Partido Popular y candidato a la Presidencia del Gobierno en las próximas elecciones generales del 9 de marzo, Mariano Rajoy, se propone poner en marcha, si gana los comicios legislativos, “un contrato de integración” con valor jurídico para los inmigrantes que lleven más de un año en España, orientado a fijar “unos principios claros” que lleven a su expulsión en caso de incumplimiento.

El Estado garantizaría al extranjero los mismos derechos y obligaciones que a los ciudadanos españoles y se comprometería a “respetar sus costumbres siempre que no contravengan la Constitución”, explicó el líder popular ayer en Barcelona.

Como contrapartida según la propuesta presentada por Rajoy, todo extranjero que quiera un permiso de residencia superior a un año tendrá que comprometerse a cumplir con la legislación vigente, saber la lengua, respetar las costumbres, pagar impuestos y “regresar a su país si no encuentran empleo”.

El líder del PP presentó las iniciativas para una inmigración ordenada como uno de los pilares de su programa electoral de cara a las generales del 9 de marzo, junto con la política económica. Con la intención de facilitar la entrada legal de extranjeros, tiene previsto poner en marcha la Agencia Estatal de Inmigración y Empleo, que se encargará de la contratación de trabajadores en sus países de origen. Este organismo valorará “las circunstancias que favorezcan la integración” de los inmigrantes, entre las que Rajoy mencionó la cualificación profesional, el conocimiento de la lengua, el sistema legal y la cultura.

El PP permitirá que las agencias privadas de empleo puedan prestar sus servicios a las empresas españolas y contraten en origen a los trabajadores extranjeros, que llegarían a España con el contrato y la formación requerida para el puesto al que estén destinados, siempre bajo el control y la supervisión de la Agencia Estatal.

Expulsión de delincuentes

El aspirante a La Moncloa se propone restablecer la modificación del Código Penal que permita la expulsión de los inmigrantes que hayan delinquido, incluso si ya cuentan con permiso de residencia en España.

“Han venido a España muchos delincuentes extranjeros”, denunció Rajoy, al tiempo que acusó a Rodríguez Zapatero de haber “neutralizado” una reforma hecha por el PP para expulsar a su país de procedencia a los inmigrantes que delincan en España, a excepción de los que cometan delitos de gravedad. A continuación, se declaró “abierto a los inmigrantes que quieran vivir, trabajar y crecer con nosotros”, pero insistió en que un Gobierno del PP “cerrará la puerta a todos aquellos que atentan contra la seguridad y la tranquilidad de los españoles”.

Rajoy también defendió una política conjunta de inmigración para toda la Unión Europea, con unos requisitos de entrada iguales en los estados socios para otorgar visados, los mismos derechos y deberes, idénticas normas para reagrupación familiar, etc. Además, insistió en “un control eficaz de las fronteras”, con patrullas conjuntas de los países comunitarios.

No más regularizaciones

Solemnemente, prometió que “no habrá más regularizaciones masivas”, con la intención de desmarcarse de la medida que adoptó José Luis Rodríguez Zapatero después de llegar al poder y que le valió las críticas de algunos países europeos. Según Rajoy, “hace tres años, sin consenso, sin pedir opinión a la oposición ni a los socios europeos, este Gobierno regularizó a 700.000 personas”. “Cuando yo gobierne anunció el candidato de la oposición, voy a trasmitir la idea de que en España no se puede entrar ilegalmente”.

El líder del primer partido de la oposición hizo estos anuncios en la clausura de una jornadas sobre inmigración organizadas por el PP en Barcelona, donde se declaró en guerra abierta contra la inmigración ilegal y abogó por una política que “se tome en serio la convivencia y la integración, las fronteras, su legalidad y a los propios inmigrantes”.

PSC
“Es copia de la propuesta de CiU”

El secretario de organización del PSC, José Zaragoza, acusó a Rajoy de copiar la propuesta del líder de CiU, Artur Mas, de implantar un carné por puntos para inmigrantes para evaluar su grado de integración. “Mariano Rajoy copia el carné por puntos para inmigrantes que propuso Artur Mas”, afirma en un comunicado Zaragoza, y añade que “ahora sólo falta que vayan juntos a firmar ante notario”, refiriéndose así a la iniciativa de Artur Mas en la campaña de las pasadas elecciones catalanas de levantar acta ante notario de que no pactaría con los populares.

“CiU y PP coinciden en hacer demagogia electoralista en torno a un tema muy delicado”, según el dirigente socialista, que considera que la propuesta de Rajoy “demuestra por enésima vez que CiU y PP van del brazo” y “están abonando el terreno para pactar” después de las elecciones. Para el secretario de organización de los socialistas catalanes, “si en algún momento Mas quiso hacer un concurso para que los inmigrantes demostrasen su catalanidad, ahora Rajoy los quiere situar en una carrera para demostrar si son buenos españoles”.