Firmarán un contrato de inserción por el que tendrán que «aprender la lengua» y «trabajar activamente para integrarse», así como «regresar a su país si durante un tiempo no logran empleo» Si el PP gana las elecciones del 9 de marzo y Mariano Rajoy es el próximo presidente del Gobierno, los inmigrantes que deseen establecerse en España tendrán que atenerse a unas nuevas normas. Un «contrato de integración» entre el Estado y el inmigrante que servirá para que éste se comprometa a «cumplir las leyes, respetar las costumbres, aprender la lengua y pagar sus impuestos como todos los demás». También deberá «trabajar activamente para integrarse», así como «regresar a su país si durante un tiempo no logra empleo».

El Estado se comprometerá a conceder a esa persona «los mismos derechos» que a un español, a formarle para lograr un empleo y a ayudarle a regresar a su país si no lo consigue.

La Administración también respetará las costumbres del trabajador inmigrante, si no son contrarias a la ley, y le enseñará castellano.

Rajoy llegó a Barcelona, donde el PP organizaba unas jornadas sobre inmigración, dispuesto a hacer acopio de titulares a golpe de propuestas rompedoras en esa materia. Consciente de que la llegada de ciudadanos extranjeros es uno de los asuntos que más preocupa a los españoles, según todas las encuestas, el líder del PP se atrevió a seguir la polémica senda que marcó durante la última campaña presidencial francesa Nicolas Sarkozy.

En un salón de actos abarrotado que le recibió con gritos de «presidente, presidente», Rajoy explicó que ese contrato de integración entre «la sociedad» y el inmigrante tendrá «valor jurídico», y se aplicará para todas aquellas personas que quieran obtener un permiso de residencia legal en España con una duración superior a un año.

El presidente del PP se mostró muy crítico con la política del PSOE sobre inmigración durante la última legislatura. Se quejó de que se haya extendido la idea de que «en España se puede entrar ilegalmente» y se ofreció a combatirla, y garantizó que «nunca más habrá regularizaciones masivas» como la que el Ejecutivo socialista llevó a cabo hace tres años «sin consenso y sin contar con la opinión de la oposición ni de los socios europeos».

«Yo no me ocupo ni de naciones ni de Franco, sino del futuro de España. Y hoy propongo una nueva política de inmigración centrada en la eficacia, en la responsabilidad y en el sentido común, todo lo que no ha habido en España durante cuatro años», insistió.

Durante el acto de Barcelona, Rajoy también prometió crear una Agencia de Inmigración y Empleo, que deberá servir, si gana las elecciones, para seleccionar a los recién llegados con el objetivo de que sus especialidades laborales se adecuen a las «demandas reales» de las empresas españolas.

Para ayudar a ese nuevo organismo, el presidente del PP propuso que otras agencias privadas faciliten a las empresas españolas la contratación de inmigrantes en origen – es decir, en sus países – , con lo que éstos llegarían a España «con contrato y con la formación requerida». Además, explicó que se dará prioridad a quienes conozcan el castellano y las costumbres del país.

Entre las medidas que propuso Rajoy está también la de garantizar una expulsión rápida de los inmigrantes que delincan. Tras quejarse de que Zapatero «neutralizara» la reforma llevada a cabo en ese sentido por el PP cuando gobernaba, el líder popular dijo que si gana el 9 de marzo cerrará las puertas «a quienes no respetan la ley y atentan contra la seguridad». «Cuando gobierne restableceré, como han hecho otros países de la UE, la expulsión de delincuentes extranjeros, y lo haré incluso si cuentan con permiso de residencia en nuestro país, siempre que el delito no sea tan grave que merezcan cumplir su pena en España», añadió.

El presidente del PP también se comprometió a «reforzar las fronteras» y reformar el sistema de vigilancia, impulsando acuerdos europeos comunes para que los que delincan «no puedan volver a entrar en la UE». Además, dijo que colaborará con otros gobiernos europeos para llegar a acuerdos sobre la reagrupación familiar – para que sirva sólo a parientes directos – o la obtención de visados, y lograr así un criterio común para toda la Unión.

El secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, comparó la iniciativa con las propuestas que hizo CiU durante la última campaña de las autonómicas. Los socialistas catalanes dijeron que el líder del PP «copia» el carnet por puntos que propuso en su día Artur Mas.

elmundo.es

Vídeo:

Vea la intervención de Mariano Rajoy.

MAS PROPUESTAS

Expulsión: Rajoy restablecerá la expulsión de los que delincan, incluso si tienen la residencia.

Agencia: Se creará un organismo para atender a las «demandas reales» de las empresas.

Fronteras: Buscará una política común con la UE y mayor control.

TIRON INTERGENERACIONAL.

Jóvenes y no tan jóvenes arroparon a Mariano Rajoy en el hotel Barceló – Sants de Barcelona. Entre los más de 400 asistentes al acto sobre inmigración destacaron los dirigentes de su partido – Ana Pastor y Daniel Sirera ejercieron de teloneros – y otros rostros conocidos como el de la ex concejal socialista Gotzone Mora. El interés que se despertó entre los simpatizantes del PP provocó que Rajoy demorase unos minutos su salida: con el coche esperándole en la puerta del hotel, se detuvo a hacerse fotos con todos los que se lo pidieron.