Los informativos estadounidenses, obsesionados con el papel de la raza en la lucha electoral, eligieron ayer de fondo la polémica «bandera confederada» que acompaña al Monumento a los Caídos durante la Guerra Civil de Estados Unidos. El emblema es para el barbero Eric Johnson y muchos otros afroamericanos un símbolo del racismo y el odio, una «bandera de los derrotados que no debería estar ahí». Pero para los que la mantienen izada, la bandera no tiene nada que ver con la esclavitud, sino con el orgullo del Sur que fue aplastado por el Norte.


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