Presos.

La Policía Antinarcóticos detuvo en las últimas semanas a dos personas que intentaban camuflar droga y llevarla a España.

La primera aprehensión se realizó el pasado 11 de enero, cuando María Fabiola Tituaña tenía en su poder 1.970 gramos de cocaína líquida camuflada en tres vasos de plástico pintado de colores.

La droga, que tenía como destino España, estaba escondida entre las paredes de estos vasos como una sustancia líquida transparente.

La otra detención se produjo el pasado 14 de enero en el aeropuerto Mariscal Sucre de Quito, donde se aprehendió a Víctor Aguirre con 2.870 gramos de cocaína, camuflados en el interior de ocho frascos plásticos que tenían como destino la ciudad de Madrid, España.

El jefe de la Policía Antinarcóticos de Pichincha, Ramiro Mantilla, explicó que los migrantes son reclutados por narcotraficantes para que lleven encomiendas a España.

“Los narcotraficantes utilizan la necesidad económica de los migrantes y les ofrecen hasta siete mil euros ($10.500) para transportar la droga”, aseguró el uniformado, quien recomendó a los ecuatorianos que no lleven encomiendas a otros países si no conocen su contenido.

Mientras, en otros operativos se desarticuló una banda que operaba en el sur de Quito y que utilizaba como traficantes a menores de edad.

La banda era integrada por cinco personas de una misma familia. Para este fin utilizaban a sus hijos, a una adolescente y un niño de 10 años, a quienes se les encontró en delito flagrante con la cocaína.

En Esmeraldas
La Policía Antinarcóticos decomisó el martes 2 mil 715 gramos de pasta base de cocaína, (2 kilos), en un operativo en la población de Tachina, al norte de la ciudad.

La droga estaba oculta en un televisor que fue embarcado en un bus de servicio público.

Durante la redada se detuvo a Eugenio Mendoza, María Quiñónez y Karen Sabando, quien según la Policía es reincidente en el tráfico de estupefaciente, pues ya fue detenida antes, en el 2003, cuando llevaba en su cuerpo 2 k de droga.