Ambos trabajaban en el mismo club de alterne, eran brasileños e iban a ser expulsados Tras «una gran discusión», la Policía halló a la mujer con el cuello cortado y a él en el patio de luces Una joven brasileña de 20 años, Tatiela de Sousa Meres, murió ayer, en Pamplona, tras ser degollada presuntamente por su pareja, quien intentó suicidarse después, saltando desde un cuarto piso. El presunto agresor, Tiego Rosa Silva, de 24 años y también brasileño, se declaró inocente del crimen y se encuentra ingresado con diversos traumatismos en el Hospital de Navarra, aunque su vida no corre peligro.

Los hechos se produjeron alrededor de las 4.00 horas en el 4º izquierda del número 6 de la Travesía Guelbenzu, ubicada en el barrio de La Milagrosa, una de las zonas con mayor población inmigrante de la ciudad. La Policía Municipal recibió dos llamadas alertando de «una gran pelea» en una de las casas del inmueble, por lo que una patrulla se personó en el lugar.

Los agentes, que tuvieron que romper la puerta para entrar en la vivienda, encontraron a la víctima tendida en un charco de sangre y con el cuello «seccionado», informaron fuentes policiales. Además, descubrieron a una persona en el patio de luces del edificio, adonde se habría arrojado desde la ventana de la vivienda, situada a unos 15 metros de altura.

El presunto agresor sobrevivió a la caída, aunque sufrió varios traumatismos, por lo que fue trasladado al Hospital de Navarra, donde se le puso vigilancia policial, según informó la Delegación del Gobierno en la Comunidad Foral. Su pronóstico es reservado y padece lesiones en tórax y piernas, aunque su vida no corre peligro.

Tanto la víctima como el supuesto agresor trabajaban en un club de alterne de la capital navarra. Según fuentes relacionadas con el caso, la joven ejercía la prostitución, mientras que el presunto asesino trabajaba como empleado del establecimiento, informa Europa Press. La pareja se había trasladado hace «poco tiempo» al domicilio donde tuvieron lugar los hechos, por lo que la mayoría de los residentes de la zona aseguró no conocerlos.

No obstante, un vecino del tercer piso confesó que en otras ocasiones había oído «discusiones» en el piso del presunto asesino, aunque se trataba de disputas «normales, ocasionadas por la convivencia diaria». Asimismo, explicó que la pasada noche se despertó alrededor de las 4.15 horas al oír un fuerte golpe «que venía del patio», tras lo cual salió al rellano donde se encontraban otros vecinos.

La joven Tatiela, que se ha convertido en la quinta mujer víctima de la violencia de género en lo que va de año, llevaba poco tiempo viviendo en casa de su pareja y estaba domiciliada en otro piso.

Según informaron fuentes judiciales, la víctima no había presentado ninguna denuncia contra su pareja, un extremo que fue confirmado por el colectivo Andrea. La coordinadora del mismo, Tere Sáez, explicó que no se había interpuesto querella, «ni había conocimiento oficial del tema ni, por supuesto, medida de alejamiento u orden de protección».

En cuanto a la investigación de los hechos, el delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, reveló que la principal hipótesis que se maneja es que se trata de un caso de violencia de género, aunque esta teoría está pendiente de confirmación hasta que se tome declaración al presunto asesino, se lleve a cabo el registro completo del domicilio y se realice la autopsia al cadáver.

Ripa explicó que existen algunos elementos que «inducen a una cierta duda a los investigadores, aunque sea mínima», como el hecho de que el presunto agresor niegue ser el autor del crimen o que la joven Tatiela estuviera domiciliada en un piso distinto. Por su parte, el Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona ha decretado el secreto de sumario en el caso.

El Delegado del Gobierno reveló también que la Policía había abierto sendos expedientes de expulsión contra los dos jóvenes el pasado mes de noviembre.

El asesinato de la joven Tatiela motivó ayer diversas concentraciones de repulsa. El Gobierno foral y el Ayuntamiento de Estella convocaron sendos actos de protesta por la mañana, mientras que la Plataforma de Mujeres Contra la Violencia en Navarra se concentró a las 20.00 horas en la Plaza del Ayuntamiento de Pamplona.