El primer ministro portugués, José Sócrates, anunció ayer que su Gobierno alterará la ley que obliga a los trabajadores extranjeros a matricular los vehículos en Portugal. «Queremos que los españoles continúen trabajando en Portugal, y por eso vamos a alterar el código de impuestos sobre vehículos para que puedan trabajar sin ser molestados por la policía», se comprometió José Sócrates al finalizar la XXIII Cumbre hispano – portuguesa.

Para el presidente de la Asociación de Profesionales de la Salud Españoles en Portugal (Apsep), Xoan Gómez, la noticia es «la guinda a sus reivindicaciones».

Desde hace dos años reclaman que se ponga fin a una ley que, según ellos, viola los derechos europeos de libre circulación.

El compromiso de José Sócrates de resolver su situación llega después de que los médicos y enfermeros escribiesen cartas a los jefes de los dos gobiernos con el objetivo de que tratasen el tema en su encuentro bilateral.

«Sabíamos que estaban al tanto de la situación, pero no teníamos tan claro que hiciesen algo», dijo a EL MUNDO el médico gallego, quien mantiene la «cautela» con la satisfacción de que «se ha dado un primer paso».

El primer ministro Sócrates admitió que los ciudadanos españoles tienen razón en sus reivindicaciones y que la ley portuguesa no está a la altura de las relaciones entre los dos países. «Los trabajadores transfronterizos que residan en España con agregado familiar no necesitan desplazarse en Portugal con otro vehículo y podrán moverse con matrícula española», explicó Sócrates, quien propondrá la alteración a la ley en el Consejo de Ministros de la próxima semana.

«Un poco de miedo»

Tras escuchar sus palabras, Xoan Gómez comentó que el concepto de «trabajadores transfronterizos» le da «un poco de miedo», y aseguró que sólo aceptarán esta definición «si todo Portugal se considera transfronterizo».

El 31 de diciembre, el Gobierno luso aprobó una alteración de la ley que eximía a los españoles de cambiar sus matrículas cuando se desplazasen hasta 60 kilómetros de la frontera. Esta vez, los profesionales españoles, encabezados por los médicos y enfermeros, no van a permitir «condiciones» en la circulación por Portugal.

«El primer ministro luso ha dicho que podremos circular libremente; esperemos que no vuelvan a meter la pata y que esta vez resuelvan el problema con espíritu europeo», matizó Gómez.

Otro de los aspectos de las palabras de José Sócrates que provocan el recelo del médico gallego es el hecho de que el jefe del Gobierno portugués citó a «los 3.000 españoles afectados».

Xoan Gómez enfatizó que ése es solamente el número de profesionales de la salud. Pero, en total, trabajan en Portugal 14.000 españoles, y las reivindicaciones de la Apsep son para todos, «sin matices ni exclusiones».