Las familias que habitan las casas cuevas del Sacromonte granadino podrán seguir viviendo en sus peculiares hogares. El TSJA ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por el Ayuntamiento de Granada contra el auto dictado por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo 2, que desestimaba la petición que hizo el Consistorio para poder acceder a las cuevas habitadas en el Sacromonte para su desalojo.

En la sentencia del alto Tribunal andaluz, contra la que no cabe recurso, se confirma «en su integridad» el referido auto y se impone al Consistorio el pago de las costas. El Ayuntamiento solicitó autorización al juez para entrar en las cuevas del Sacromonte habitadas por okupas, ante la negativa de estos a abandonarlas, por el estado «ruinoso e insalubre» que presentan las cavernas. El TSJA ha considerado que, frente a la necesidad municipal de entrar en las cuevas, debe «primar» el derecho individual a la inviolabilidad del domicilio consignado en la Constitución Española de, al menos, 44 moradores, en su mayoría de etnia gitana.

La Sala argumenta que habría sido necesario una solicitud de entrada individualizada por morada, y no una «acumulada» como hizo el Consistorio. Esto hubiera permitido, dice la sentencia, un «adecuado control» sobre extremos tan esenciales como la propiedad, los moradores y la posibilidad de audiencia previa en el expediente de ruina.

Réplica del Consistorio

Tras conocer esta resolución, el Ayuntamiento ha señalado a través de un informe de su Secretaría General que la petición «generalizada» de entrada a las cuevas «se fundamentó en la existencia de una única finca registral en la que diversas personas habían aprovechado los hipogeos para construir moradas transitorias». También señala que la sentencia no impide que el Consistorio subsane las deficiencias que han originado y que se deniegue la entrada. En este sentido, añade que pese a que el Ayuntamiento «obviamente» acatará en sus términos la sentencia, se continuará el expediente con el fin de poder eliminar los riesgos que las cuevas presentan para la seguridad y salubridad de los moradores.

A principios de 2007 el Ayuntamiento inició ante un gran despliegue policial el tapiado de las casas cueva deshabitadas del Sacromonte, después de que dictara orden de desalojo de las habitadas por ocupación ilegal y riesgo de derrumbe. El consistorio proyectaba construir un hotel y tablaos flamencos en el mítico lugar granadino.