Sucesos

La banda de las 'pistolas plateadas'

El Mundo, PABLO HERRAIZ, 17-01-2008

La Policía detiene a siete personas que atracaron con gran violencia más de 50 locutorios y cometieron al menos cinco agresiones sexuales a las clientas de los locales Los conocían como «la banda de las pistolas plateadas», y en dos meses apenas ha habido día en que no atracaran. Eran siete personas: seis hombres y una mujer, todos amigos del barrio. Vivían en Vicálvaro y Valdebernardo, donde comenzaron haciendo de las suyas. Si bien no formaban una banda de crimen organizado, sí eran un grupo de delincuentes muy violento.


El grupo I de la Brigada Provincial de Policía Judicial los arrestó el pasado sábado, después de que un coche patrulla los interceptara en el Barrio de Salamanca y éstos pelearan con los policías. Los siete fueron arrestados por separado, porque eran muy violentos, según la Policía.


Según explicó ayer el comisario jefe de la UDYCO de Madrid, José Luis Conde, la banda fue detectada en octubre, cuando comenzaron a atracar casi todos los días. Empezaron con locutorios de Sanchinarro, San Blas y después se movieron a Ciudad Lineal, donde dieron más golpes. A medida que robaban, cambiaban de zona para que no se les identificara.


La manera de operar de esta banda era siempre similar: el conductor del coche, David Barrios, español de 23 años, aparcaba a dos o tres manzanas del locutorio y se comunicaba con los otros por walkie – talkie; otros dos o tres, todos de origen suramericano, entraban armados al local y amedrentaban a la gente. Solían llevarse poca cosa, per sembraban el terror. En su botín entraba de todo, ya fueran tarjetas de seis euros para llamar por teléfono o las joyas de las clientas.


Complicidad


Además de lo que robaban a la gente del locutorio, al menos uno de los individuos agredió sexualmente a cinco mujeres con la complicidad de los otros. La Policía ha comprobado hasta ahora la autoría de 21 atracos y esas cinco agresiones, aunque sospechan que las denuncias por esto último aumentarán ahora que las víctimas pueden identificar a los delincuentes. Rubert Radhames, dominicano de 33 años, ha sido identificado como el agresor sexual. El cabecilla de la banda era Arles Darío, colombiano de 22 años, un tipo muy violento. En más de una ocasión entró en los locutorios a tiro limpio, y una vez disparó contra un testigo que lo persiguió por la calle.


Las denuncias coincidían en que los atracadores iban armados con dos pistolas plateadas de calibre pequeño. También solían llevar pasamontañas. Ninguno de los detenidos tenía una profesión conocida, y eran aficionados a gastarse todo el botín en juergas.


No menos de 400 euros


Con el dinero que recaudaban, los miembros de la banda se iban a bares de salsa, compraban cocaína (que les conseguía el conductor español) y alguna vez usaban los servicios de prostitutas. Eran muy aficionados a la crápula nocturna. Después dormían por la mañana y atracaban por la tarde.


Si sacaban menos de 400 euros en un robo, esa misma tarde daban otro golpe. Todo para gastárselo después en los garitos. Alguna vez incluso iba un solo miembro del grupo para cometer atracos.


De los siete detenidos por el Grupo I de Policía Judicial, dos no se implicaron en los atracos, pero eran los encargados de vender los objetos robados. Entre el material recuperado hay teléfonos móviles, cocaína, un portátil, joyas, relojes, pasaportes y dinero en efectivo. Aparte, los agentes han encontrado decenas de tarjetas de teléfono que costaban unos seis euros y ellos revendían a gente de su entorno por la mitad de precio.


Se está investigando si también atracaron otros negocios aparte de locutorios (aunque haya 21 confirmados, creen que podrían llegar a 55), como agencias de viajes. Cada vez se alejaban más de su barrio, con lo que la sensación de inseguridad que crearon en muchas zonas era grande.


De los siete, dos tienen antecedentes. David Barrios tenía tres detenciones por robo con fuerza y malos tratos en el ámbito familiar; John Alejandro, ecuatoriano, de 21 años, otras dos por esto último.

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