TAPACHULA, Chis. El gobierno de El Salvador solicitó formalmente a las autoridades mexicanas la identificación, exhumación y repatriación de 10 de 13 salvadoreños que fallecieron en octubre pasado durante el naufragio de una embarcación tiburonera en la costa de Oaxaca, informó el cónsul general de ese país en Tapachula, Nelson Miguel Cuéllar Hernández.El diplomático salvadoreño explicó que la lista de los cuscaltecos muertos en el percance de octubre la encabezan: Salomón Antonio González Pushugua, Ricardo Guerrero Hernández, Ana Marleny Flores, Aracely Gómez de Arias, Norma Yessenia Rivera de González, Lidia Noemí Reyes Campos, María Andrea Rivas López, Francia Maricela Ordóñez Moran, Mario Enrique Martínez Arteaga y Margarita Guevara Hernández.Los tres cuerpos restantes aparentemente pudieran pertenecer a migrantes de algunos otros países del istmo centroamericano, quienes viajaban en la misma embarcación, la cual naufragó el año pasado debido a las malas condiciones climáticas que se presentaron en la región.Cuéllar Hernández señaló que el juez que lleva la causa en el Salvador determinó la identidad, de acuerdo al cotejo de las pruebas de ADN que se practico a los cadáveres y a los familiares de las personas que presumían alguna relación.El funcionario dijo que hasta el momento no hay ninguna fecha para determinar el día en que se exhumen y sea repatriados los cadáveres de sus connacionales que fueron enterrados en el panteón local del municipio de Juchitán, Oaxaca.El gobierno de El Salvador asumirá los gastos del traslado de los 10 cuerpos de Juchitán.De acuerdo con los informes de los tres sobrevivientes salvadoreños, Noemí Estela Martínez Orellana, Juan Pablo Cruz y Walter Alán, por lo menos 24 migrantes indocumentados naufragaron en la zona del golfo de Tehuantepec, Oaxaca, a bordo de una embarcación tiburonera propiedad de un coyote mexicano identificado como Manuel de Jesús Martínez Ovando, quien supuestamente piloteaba la lancha y que fue uno de los sobrevivientes.Martínez Ovando tiene más de 10 años de vivir en Guatemala, casado con Maricela Rodas Morales, y en las comunidades de Ocós, El Limón, La Blanca y Tipala, se dice que es uno de los líderes del trafico de humanos. La ruta marítima se ha convertido en la mejor opción de inmigrantes para acercarse a EU.