Los seis inmigrantes encontrados muertos en los últimos días en las costas de Cádiz viajaron en una “pequeña” embarcación que zozobró en medio de un temporal que les sorprendió en su travesía por el Estrecho. Ésta es la hipótesis que baraja con más fuerza la Delegación del Gobierno en Andalucía para explicar que el Sistema Integral de Vigilancia en el Estrecho (SIVE) no detectara la embarcación. “Creemos que salieron con buen tiempo y les sorprendió el temporal de olas grandes que impidió que el SIVE les avistara y fueran a socorrerles”, afirmó Juan José López Garzón, delegado del Gobierno en Andalucía.

Las Fuerzas de Seguridad del Estado no descartan que el mar arroje algún cuerpo más en los próximos días. El delegado puso el acento en que todos los fallecidos eran jóvenes de entre 20 y 25 años. “Es necesario concienciar de los peligros de la inmigración clandestina al segmento más joven de la población magrebí”, dijo.

En sintonía con esta premisa, la delegación de migraciones del Obispado de Cádiz y la Asociación Cardijn anunciaron ayer la impartición de “foros de reflexión sobre la inmigración” en las escuelas de educación secundaria, Formación Profesional y Universidades de las principales ciudades de la costa norte de Marruecos (en el entorno de Tetuán, Tánger y Larache) y de la provincia de Cádiz.

Según el promotor de la iniciativa, el sacerdote Gabriel Delgado, el objetivo es “informar a los jóvenes sobre el alcance real de los graves riegos de la inmigración ilegal y la actividad de las mafias dedicadas al tráfico de personas”.

Los organizadores ofrecerán a los institutos material formativo en diversos formatos, entre ellos el DVD de un documental elaborado por la Diputación de Cádiz, que pormenoriza los daños que ha originado el fenómeno de la inmigración en las últimas décadas en el Estrecho.

Delgado aseguró que el contenido de este foro puede llegar este mismo mes “a miles de jóvenes” y explicó que, junto a la Iglesia católica, participarán en la iniciativa otras organizaciones ya asentadas en el norte de Marruecos. La Subdelegación del Gobierno en Cádiz anunció ayer el mantenimiento del rastreo de la costa, ante el temor de que puedan aparecer otros cadáveres en la costa.