R. N.
Granada- Las costas granadinas se han convertido en los últimos días en «punto caliente» de la inmigración irregular. Un total de 136 personas llegaron a provincia andaluza en 24 horas entre la patera interceptada el miércoles frente a la isla de Alborán con 73 personas y las 63 que viajaban en la localizada el jueves cerca de Almuñécar. Todos, salvo tres, son de origen subsahariano. La última embarcación fue localizada ayer en la franja del litoral comprendida entre Almuñécar y Torrox (Málaga). Estaba ocupada con 63 subsaharianos, entre los que había doce mujeres y un bebé de dos meses que, junto a su madre, fueron trasladados al Hospital Santa Ana de Motril, donde pasaron una revisión médica. El pequeño sobrevivió por la lactancia materna, aunque la madre estuvo tres días sin comer ni beber. La embarcación fue interceptada a las nueve de la mañana por Salvamento marítimo.