Decenas de ciudadanos magrebíes residentes en Valencia acudieron ayer a una concentración convocada en el barrio de Russafa para solidarizarse con las 37 víctimas mortales de los dos atentados suicidas perpetrados el pasado martes en Argelia, que consideran una “barbarie”. Con las manos pintadas de verde, blanco y rojo – colores de la bandera argelina – , con la media luna roja que representa al Islam, estos vecinos de Russafa pidieron que “no se siga matando en nombre de inocentes y de la religión”. “Matan engañando a personas en nombre de Alá, cuando el Islam significa paz”, dijo uno de los asistentes.