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ALMERIA/MURCIA. Miguel Corpas, subdelegado del Gobierno en Almería, anunció ayer que las obras de implantación del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) en el Levante peninsular arrancarán, previsiblemente, a principios de 2008. En declaraciones a Europa Press, Corpas precisó que el proyecto se encuentra actualmente en fase de estudio para proceder a la instalación de los equipos necesarios, aunque ya se han elegido los emplazamientos concretos a lo largo del eje levantino donde se ubicarán los dispositivos. El subdelegado detalló que los sistemas de vigilancia en la costa del Levante se pondrán en marcha en 2008, si bien aclaró que el desarrollo del SIVE de Murcia es el que está «más adelantado» frente al del Levante almeriense.

Después de que el Gobierno constatara un desplazamiento de las mafias que trafican con inmigrantes hacia las costas españolas de Levante, la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, anunció el pasado septiembre el inicio de los estudios correspondientes para ampliar el SIVE a las costas de Murcia, Valencia, Alicante e Ibiza en 2008. El objetivo principal de este sistema de control es mejorar la vigilancia de la frontera española a través de tecnología avanzada y luchar contra el narcotráfico y la inmigración irregular.

Mientras tanto, continúa la llegada de pateras al Levante español. Ayer, la Guardia Civil intervino una pequeña embarcación que estaba varada en una playa de Águilas (Murcia) y detuvo a cuatro inmigrantes irregulares, que dijeron ser argelinos, en la zona de Calblanque, en el término municipal de Cartagena, según informó la Delegación del Gobierno.

En Almería, agentes de la Benemérita localizaron a diecisiete varones de nacionalidad marroquí, entre los que se encontraba un menor de edad, tras desembarcar la patera en la que viajaban en el litoral de Punta Entinas – Sabinal, en El Ejido. Los 17 inmigrantes, en aparente buen estado de salud, fueron trasladados al cuartel de la Guardia Civil de El Ejido donde la Cruz Roja les prestó la primera asistencia humanitaria. Posteriormente pasaron a disposición de la Policía Nacional.

La noche del pasado jueves, otra patera, en la que viajaban 65 inmigrantes, llegó al puerto de Motril (Granada) después de que fuera interceptada por efectivos de la Guardia Civil a unas 40 millas de la costa.