EFE
Santa Cruz de Tenerife

El inmigrante que anoche falleció tras ingresar con problemas de hipotermia en el Hospital de La Candelaria, en Tenerife, sufrió deshidratación hipertónica, con alto grado de sodio en el cuerpo, dijeron hoy fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.

Esta persona era una de las 39, dos de ellas muertas, que ocupaban un cayuco que durante la madrugada del miércoles llegó al puerto de Los Cristianos, en el municipio tinerfeño de Arona.

Además del ahora fallecido precisaron atención médica otros tres ocupantes de ese cayuco, uno de ellos por haber sufrido la amputación de un dedo de una mano, y que ha sido dado de alta.

Las fuentes dijeron que en el Hospital Universitario de La Candelaria ingresó anoche otro inmigrante que está en situación grave por problemas de hipotermia.

Durante la noche del martes y del miércoles llegaron a Tenerife dos cayucos, en el primero de los cuales viajaban 52 varones subsaharianos, entre ellos uno que había fallecido y dos posibles menores de edad.

En el segundo había 37 personas con vida y dos cadáveres, a los que se ha sumado el fallecido anoche en el Hospital Universitario de La Candelaria.

En este centro hospitalario continúan ingresados tres de los inmigrantes que llegaron durante la noche del martes y el miércoles, comentaron las fuentes.

Una de estas personas tiene pancreatitis y está pendiente de su ingreso en medicina interna, mientras que las otras dos sufren deshidratación “importante” y destrucción del tejido muscular, señalaron las fuentes.

Los dos pacientes que tienen deshidratación y destrucción del tejido muscular están graves aunque han mejorado durante las últimas horas, agregaron las fuentes.

Además, en el Hospital Universitario de Canarias están ingresados dos inmigrantes, uno de los cuales está previsto que sea dado de alta durante las próximas horas, y el otro trasladado a la planta de medicina interna.