El inmigrante que falleció en la noche del miércoles tras ingresar con problemas de hipotermia en el Hospital de La Candelaria, en Tenerife, sufrió deshidratación hipertónica, con alto grado de sodio en el cuerpo, explicaron ayer fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.

Esta persona era una de las 39, dos de ellas muertas, que ocupaban un cayuco que durante la madrugada del miércoles llegó al puerto de Los Cristianos, en el municipio tinerfeño de Arona.

En el Hospital Universitario de La Candelaria ingresó el miércoles por la noche otro inmigrante, en situación grave también por problemas de hipotermia.

Durante la noche del martes y del miércoles llegaron a Tenerife dos cayucos, en el primero de los cuales viajaban 52 varones subsaharianos, entre ellos uno que había fallecido y dos posibles menores de edad. En el segundo había 37 personas con vida y dos cadáveres, a los que se ha sumado el fallecido en La Candelaria.

En este centro hospitalario continúan ingresados tres de los inmigrantes y dos más en el Hospital Universitario de Canarias.

13 menores más

Además en el cayuco con 54 personas a bordo que, tal y como informó ayer este periódico, llegó a las 23:30 horas del miércoles al puerto de Los Cristianos, después de ser interceptado por la “Salvamar Altheratz” de Salvamento Marítimo, hay 13 que podrían ser menores de edad. Llevaban 3 días de travesía y salieron de Mauritania, según manifestaron.