Juan Manuel Pardellas
Las Palmas de Gran Canaria

La semana pasada será recordada como una de las más activas del año. Lunes: Resaca de uno de los mejores Womad. Ecos de Mory Kanté, Kila, Kouyate y Cobham. Unas vallas publicitarias aseguran que «Tenerife es muy caro», pero ninguna autoridad competente (¿?) ha puesto el grito en el cielo, dando por bueno ese mensaje a todo el que viene de fuera. Martes: Auto del TSJC versus balón de oxígeno para Miguel Zerolo. Aún le quedan, como mínimo, dos escollos más: resolución de la investigación iniciada por Anticorrupción y la derivación del Caso Fórum. La ciudad mantiene el uso público de la playa, se desbloquean las obras y los empresarios, esos ciudadanos de a pie a los que les avalan un crédito mil millonario a través de una empresa fundada días anes con medio kilito, tiemblan a la hora de pensar si tendrán que devolver al ayuntamiento algunos de los 8.500 milloncejos de los de antes.

Este cuarto punto del auto del TSJC es el gran varapalo, pero no al alcalde, sino a los tres partidos (CC,PP, PSOE) alguno parece olvidarlo que aprobaron la operación. Ese día, el Gobierno firma con la Fundación Armenteros el envío de 90 menores extranjeros no acompañados a Salamanca. Si el presidente y su vice (uno parece no hacer nada sin el otro) son culpables de los mensajes desnortados y peligrosos contra los inmigrantes, también lo son de esta jugada maestra, irreprochable y digna para los chicos. Se nota la mano del equipo de la consejera Rojas en desenmascarar a Rumí y Caldera. Miércoles: El pleno del Parlamento reúne a la pandilla basura, carente de los mínimos cívicos de educación, respeto al prójimo (y a quienes representan) y a los que defienden ideas contrarias. Jueves: Dimite Daniel Cerdán de la tele pública. Su mejor decisión desde que, por ese especial sentido de la lealtad y la responsabilidad, asumió el hueco de Santi González. Viernes: 1.200 agentes británicos refuerzan Tenerife como destino (¿pero no era caro?). El tándem Rivero Soria propone a Willy García como director general de la radiotelevisión pública. Ah, y Larry Álvarez se separa de Teresa Cruz, así que fuera sospechas de nepotismo.