Verónica Suárez Esparza, ecuatoriana de 22 años, recibió de manos de Marta Vera, directora de la Cámara de Comercio, el premio al emprendedor inmigrante. Su proyecto, Aruñarte, un estudio de manicura que aplica una nueva técnica, se impuso sobre otros doce proyectos. De esta manera, la Cámara Navarra de Comercio reconoce la mejor propuesta empresarial de emprendedores de este colectivo.

El premio consiste en avalar a Verónica Suárez en los préstamos necesarios para financiar el proyecto y su puesta en marcha, hasta un máximo de 30.000 euros y de 6.000 euros en servicios de consultoría y formación prestados por Cámara Navarra.

En cuanto al perfil de los candidatos, por sexo, seis de los proyectos fueron presentados por mujeres, cuatro por hombres y en los otros dos casos había promotores de ambos sexos. En cuanto a la nacionalidad, ocho pertenecen a diferentes países de Latinoamérica, uno es de procedencia marroquí, otros dos procedían de países de la UE (Francia y Rumania) y otro procede de Rusia.

Marta Vera, directora de la Cámara Navarra de Comercio, recalcó que el 10% de la población navarra es inmigrante y de este porcentaje, un 9,1% son trabajadores autónomos: “Este es un fenómeno necesario y positivo para el crecimiento de Navarra. Este es uno de los colectivos con los que queremos trabajar”.

En el acto también estuvo presente Pablo Cadena, empresario ecuatoriano que ha fundado los restaurantes Casa Luis y El Embrujo. Su historia es la de un inmigrante emprendedor de éxito: “No nos tenemos que sentir inmigrantes. Tenemos que aportar nuestro grano de arena al país y debemos adaptarnos a sus costumbres sin olvidar nuestras raíces. Lo que cuenta es confiar en tu proyecto”.