Sólo uno de cada diez inmigrantes en situación irregular en la Región fue expulsado o repatriado a sus países de origen durante los ocho primeros meses de este año. El dato lo proporcionó ayer el Gobierno a través de la Brigada de Extranjería de la Jefatura Superior de Policía Nacional, en respuesta a una pregunta escrita formulada por la diputada Lourdes Méndez (PP), que pertenece a la subcomisión parlamentaria que analiza el tema inmigratorio.

En concreto, el Gobierno afirma que hasta el 31 de agosto la Brigada de Extranjería tramitó 4.219 expedientes de expulsión. En el mismo periodo, sólo se ejecutaron 486, un 11,5%. «Los que no son expulsados», señala Méndez, «quedan en una especie de limbo administrativo». Según la diputada, «las políticas de integración que llevan a cabo con esfuerzo los ayuntamientos y las comunidades autónomas van bien, pero a nivel nacional no se está haciendo nada».

Más control

La congresista también preguntó por el número de irregulares que alcanzaron desde junio las costas murcianas en pateras «ya que no había una cifra segura y fiable». La respuesta del gobierno llegó algo más de un mes después: Entre junio y finales de septiembre habían llegado a nuestras costas 206 inmigrantes.

Méndez pide «más control» para evitar estas avalanchas de pateras y señala que la instalación del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior, SIVE, es un paso adelante, «pero con la actual dotación presupuestaria, no estará plenamente operativo hasta el 2009». La congresista popular afirma que pese a que se han aprobado las partidas para los radares en tierra, echa en falta dotación para los medios de interceptación, es decir, para las patrulleras.

«Los expertos dicen que a los 4,5 millones de inmigrantes que tenemos ahora se sumarán otros tantos a medio plazo, creo que es hora de que el Gobierno central haga algo al respecto de forma urgente», concluyó Méndez.