El ministro Caldera, de visita en Dakar, afirma que los emigrantes de ese país «tienen un excelente perfil para integrarse en la sociedad española» El ministro español de Trabajo, Jesús Caldera, y el titular senegalés de Interior, Ousmane Ngom, firmaron ayer, en Dakar, un memorándum de entendimiento por el que España se compromete a contratar en origen a 2.700 ciudadanos senegaleses.

Según el documento, este programa, que se realizará en los dos próximos años, pone de manifiesto la voluntad de ambos países de reforzar la cooperación en todos los ámbitos, especialmente en lo que se refiere a la gestión de los flujos migratorios.

Las empresas de pesca concederán un total de 2.000 contratos a jóvenes que serán preparados durante un periodo de tres meses en un centro de formación marítima en Dakar, paso previo a una selección definitiva y la posibilidad de trabajar en España.

Los 700 otros contratos se destinan al sector de la agricultura, especialmente la explotación de las fresas, y se pondrán en marcha en enero próximo.

Se prevé que un importante número de mujeres integre este programa agrícola para favorecer el principio de igualdad de género.

Los contratados trabajarán una temporada en España y volverán a su país para mantener a su familia y trasladar las experiencias adquiridas durante la estancia.

En una rueda de prensa ofrecida conjuntamente, Caldera y Ngom destacaron que la firma del memorándum demuestra que «una alternativa creíble a la emigración ilegal es posible».

La oferta de los 2.700 contratos laborales por parte de empresas españolas se debe al perfil profesional y moral de los trabajadores de ese país en España, según afirmó Caldera.

Resaltó que los casi 40.000 emigrantes senegaleses que viven y trabajan en España no tienen ningún perfil delictivo y no hay ninguno en las cárceles.

«Los senegaleses tienen un excelente perfil para integrarse en la sociedad española», agregó Caldera, que expresó su voluntad de animar personalmente a las empresas a contratar una mano de obra procedente de este país que se ha convertido en una prioridad para España.

Dijo que los nuevos contratos ofrecidos por las empresas de pesca y agricultura hacen posible cumplir con la solicitud del gobierno de Senegal de colocar a 4.000 trabajadores en el mercado laboral español.

«Es una buena noticia», comentó el ministro senegalés del Interior, que analiza este logro como la realización de las ambiciones de los máximos dirigentes de ambos países.

Además, recordó el viaje realizado en 2006 a Senegal por el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que confirmó la visión que comparte con el presidente senegalés, Abdoulaye Wade, con respecto al fenómeno de la emigración ilegal, informa Efe.

«Acabamos de tomar una decisión muy importante que nos permite alcanzar o, mejor dicho, superar nuestros objetivos», afirmó Ngom, que agradeció a España su gesto en nombre del presidente Wade y del pueblo senegalés.