El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, viajará hoy a Senegal con un “paquete muy importante de contrataciones en origen” y pedirá a las autoridades de ese país que extremen la vigilancia respecto a la salida de cayucos de sus costas.

En declaraciones en Radio Nacional de España, Caldera apostó por seguir combatiendo la inmigración ilegal a través de la vía de la cooperación y del control de las fronteras marítimas.

“El jueves le pediré a las autoridades de Senegal todavía más vigilancia, que sea más intensa, para evitar que esos traficantes de la vida de esos jóvenes puedan seguir llevándolos o induciéndolos a coger un cayuco”, explicó ayer Caldera, quien insistió en que sólo caben la “vía de la cooperación de España con esos países y la vía de que si las empresas españolas los necesitan, los contraten en origen”.

Cooperación

Según el ministro, “las empresas españolas se están volcando” con esta iniciativa y “las autoridades senegalesas están cooperando intensamente con España”.

Para Caldera, “nunca se había volcado España tanto con África como ahora, hay que ayudarlos en origen, hay que distribuir escuelas taller para que formen a sus jóvenes” porque “sólo puede llegar a España legalmente quien pueda tener un empleo, nadie más”.

Una de las reivindicaciones de los países exportadores de población es que desde Europa se invierta en la formación de los jóvenes en su lugar de origen, bien para que puedan salir adelante en su zona o para poder trabajar en otros países, después de estar bien cualificados.