Por temor a que su vida corra peligro, casi 50 presuntos inmigrantes indocumentados se entregaron a la Patrulla Fronteriza desde el domingo mientras escapaban de uno de los incendios forestales más grandes que se hayan registrado en el sur de California, cerca de la frontera con México.

La Patrulla Fronteriza informó que no ha detectado ningún caso de inmigrantes lesionados por el fuego, pero agregó que sus agentes están explorando una zona muy arbolada en San Diego.

Mientras tanto, el consulado de México en San Diego y la Patrulla Fronteriza alertaron ayer a los indocumentados que no intenten cruzar la frontera, ya que pondrían en peligro sus vidas por los incendios forestales que afectan al sur de California.

El portavoz del consulado de México, Alberto Lozano Merino, dijo que es probable que algunos traficantes busquen convencer a inmigrantes para que crucen la frontera bajo el argumento engañoso de que la Patrulla Fronteriza estará distraída o que el humo ayudará a ocultarlos.

Lozano señaló que ayer fueron detenidos dos grupos de seis personas cada uno que intentaban cruzar la frontera cerca del área de la Garita de Otay.

Uno de los inmigrantes del segundo grupo, interceptado por el equipo de bomberos, se encuentra estable en la unidad de cuidados intensivos, con quemaduras de segundo grado en todo el cuerpo, mientras que el resto solo sufrió quemaduras leves, afirmó Lozano. Por su parte, los inmigrantes del primer grupo están ya bajo custodia de la Patrulla Fronteriza.

Pese a que medios de comunicación locales han informado la detención de otro grupo compuesto por cerca de 50 inmigrantes, Wendy Lee, portavoz de la Patrulla Fronteriza, declaró que hasta el momento su agencia no tiene información al respecto.