Pamplona. En la modesta sede del Consejo Escolar, un órgano un tanto nómada y virtual, Urtasun ya ha personalizado su pequeño txoko . Empeñado en compartir en una foto protagonismo con Loli y Gorka – los únicos hilos de continuidad de este Consejo por el que han pasado Guillermo Herrero y Javier Marcotegui – responde mezclando su explosividad genética con un poso más reflexivo.

Su último puesto público fue el de director general de Educación, con Pedro Burillo. Han pasado muchos años desde aquel fin del tripartito. ¿Ha cambiado Navarra? ¿Y la educación? ¿Y Ángel Urtasun?

Han pasado 11 años, que se dice pronto. Ha sido un periodo muy rico profesionalmente. Volví del departamento de Educación con la idea de que la LOGSE estaba en pie y había que ponerla en marcha. Me metí de lleno en el aula y con 3º de ESO, el tramo más novedoso y complicado de la reforma. Empezó a hablarse de la diversificación curricular y por eso me incorporé en 1998 a las llamadas plazas de ámbito. Estuve 5 años, con gran desgaste psicológico. En 2003 pasé a dar clase a primer ciclo de ESO, con niños de 12 y 13 años. No había trabajado con esas edades. Ha sido un periodo muy rico y ahora estaba pensando en volver a la diversificación curricular cuando me propusieron este cargo. Llevaba 31 años en el aula y el momento ha sido también bueno para cambiar.

¿Qué queda de aquel impetuoso director general de Educación de 1995?

Yo he cambiado mucho. Aquella época la recuerdo con mucho cariño. Cuando Pedro Burillo me ofreció el puesto me pareció alucinante. Ahora tengo mucha más experiencia y quizá más serenidad. No obstante creo que este momento político tiene similitudes con el de 1995. Lo único que quedó claro tras las últimas elecciones es que UPN y CDN no podían seguir gobernando con mayoría absoluta. A partir de ahí se han abierto algunas posibilidades que han hecho que algunas personas que nos consideramos independientes o puentes de unión tengamos ganas de trabajar. Y si nos dan esa oportunidad, ¿cómo la vamos a rechazar?

Y vino de la mano de CDN hacia una persona que fue consejero con el PSN y que también ha colaborado en algunos foros de debate de la base social de NaBai. Para algunos será independiente, pero para otros puede ser un chaquetero…

La diferencia entre independiente y chaquetero debe ser mínima… En fin. No creo que tenga que defenderme de nada de esto. Igual ser independiente también es malo porque la vida exige compromiso… Yo lo que puedo decir es que desde siempre, desde que estoy en la educación, desde 1976 y posiblemente antes, como adolescente, siempre me he considerado una persona dispuesta a tender puentes de entendimiento. He tenido muchas experiencias en la vida, no sólo en el campo profesional. Yo bebí de unas fuentes difíciles en un momento complicado en el grupo de danzas de Pamplona. Fue una etapa de mi vida extraordinaria, entre otras cosas porque conocí a mi mujer. Estoy hablando del periodo 1971 – 1978. Trabajar en un grupo de danzas con un sistema de cogestión en el que yo estuve unos años como primus inter pares , que dijeron en una crónica periodística, te marca en esa línea de buscar el entendimiento. Espero mantener esta filosofía en este nuevo puesto. Es verdad que Burillo me ofreció la dirección general aunque ni él ni yo teníamos carné del PSN. Fui a aquel gobierno porque me parecía plural y me gustaba también que estuviera CDN con 10 parlamentarios, como me parecía muy interesante que estuviera EA y apoyara IU. Fue un buen momento para trabajar y ahora ha ocurrido otra cosa. No he colaborado directamente con NaBai pero sí he asistido a jornadas de presentación de su programa con mucho interés. Y participé activamente dando ideas. Y también he tenido contactos con CDN y una relación extraordinaria con personas del PSN. No tanto con el partido, porque en estos 11 años no me ha requerido para nada. No me preocupa mucho lo que se diga de mí, que me juzguen por mi trabajo.

Un trabajo que no tiene quizá demasiado margen ya que los consejos escolares están muy atados por la estructura a dar el mero visto bueno a las propuestas del Gobierno y su vitalidad depende en parte del empuje del presidente.

Sucedo a dos presidentes, Guillermo Herrero y Javier Marcotegui, con un gran currículum en el mundo educativo y muy vinculados a sus partidos. No es mi caso porque puedo ser conocido pero no tengo su nivel intelectual, pero puedo suplir esto con el hecho de ser una persona conocedora y sufridora del aula. Puedo aportar el conocimiento de la realidad actual de la educación. Mi talante va a ser el de confiar también en la participación de los consejeros. Somos un órgano de ayuda y asesoría y la Administración debiera ser inteligente en aprovechar nuestra labor.

¿Echa de menos – o de más – a alguien en este Consejo?

Bueno. Le dije al consejero que quería empezar viendo cómo funcionaba el Consejo tal y como está. Es cierto que hay solicitudes de colectivos para contar con voz en este órgano, por ejemplo ADI, etc. Los escaños de los alumnos están vacíos por falta de asociacionismo… No descartamos cambios acordados.

No como presidente del Consejo, sino a título individual, con su experiencia educativa, quisiera que opinara, a quemarropa , sobre algunos temas. Por ejemplo. ¿Aulas de 2 años sí, aulas de 2 años no?

Es un tema que me lleva también 11 años atrás. Cuando llegué al departamento me encontré con esta realidad y me dijeron: “Esto ni lo toques”. Yo creía entonces que el tramo 0 – 3 iba a llevar una reglamentación más rápida porque era uno de los logros de la LOGSE aunque se presumía costosa. Ni España ni Navarra han sido valientes en el abordaje de esta etapa. Se ha ralentizado y se ha aprobado un decreto en el que puede haber aspectos que contradigan la propia LOE. Espero que esto se clarifique y no se vuelva a la discusión de guardería o colegio , educativo o asistencial …

¿De acuerdo con los puntos complementarios que se dan a hijos de antiguos alumnos en la prematrícula?

También me he encontrado con este tema en la mesa. Hay sectores de la sociedad que ven en esto una garantía para que sus hijos estudien en su mismo colegio en un momento de fuerte demanda. Pienso que es muy discutible, porque se limita el derecho de que cualquier pareja pueda elegir cualquier centro.

¿A favor o en contra del velo?

Creo que estamos ante un mundo en el que no se puede hablar en blanco o negro, sino de grises. Pienso que un centro escolar no puede poner una norma interna que margine a una parte de la población. El MEC está recomendando evitar esto. Hay que primar por encima de todo la educación de 6 a 16 años. Porque además, del debate del velo podemos pasar al del uniforme… En mi opinión, hay que priorizar la atención educativa y la libertad de esta persona para ir con velo, luego la educación que le demos le dará más elementos para que decida seguir con esa prenda o no. Esto forma parte del bagaje cultural que podemos transmitir en la escuela. Si los tenemos en la escuela claro. Si no, no hay nada que hacer.

¿Hay que redistribuir el alumnado inmigrante entre redes o centros?

En primer lugar me gustaría saber cuál es el problema. El sistema educativo ya tenía dificultades de diversidad con la extensión de la ESO y ahora llega otra realidad como la inmigración. La principal dificultad no es la acumulación. Esto se debe a un sistema de matriculación que también tenemos previsto para la población autóctona en función del lugar de residencia y la libertad de elección. ¿Cómo vamos a hacer otro para los extranjeros? Hay que estudiar la casuística centro a centro, no como redes, y, en clave de autonomía, dar recursos donde hay necesidades. No creo que la solución esté en el reparto, porque tampoco creo que la inmigración sea un problema, hay dificultades como con los autóctonos. Eso sí, reivindico para todos una escolarización lo más cercana posible al domicilio y en este sentido me parece un escándalo la última reforma de la prematriculación.

Centros concertados con dinero público que separan niños y niñas…

Es otro asunto que chirría , como el del velo. Es cierto que estos centros han defendido esta separación en que hay una demanda social. La clave está en el dinero público. También hay que reconocer que la segregación de género no es la única. También está el modelo lingüístico. Dudando mucho de su efecto social y educativo (la sociedad no está separada por géneros en la calle) puedo llegar a entender que en un sistema liberal se permitan estos conciertos.

Pero, ¿no se puede estar generando un sistema educativo alejado, por diferentes causas, de la realidad social que hay fuera de las aulas…?

Sí, es una especie de enseñanza en burbuja. De todas formas yo viví con cierto dramatismo la situación que me encontré en el departamento de separaciones de centros por modelos lingüísticos . Veía un notable riesgo social a quince años vista, aunque parece que las cosas han funcionando mejor de lo que creía. Me alegro, pero creo que hay alumnos que se están escolarizando en centros que no tienen nada que ver con la plaza del pueblo. Me sorprende cómo algunos colegios que pueden segregar por razones sociales, de género, religión o idioma hacen gala en su proyecto educativo de la apuesta por la integración, solidaridad con el Tercer Mundo… Yo en mi IES, el Navarro Villoslada, veía esa convivencia de culturas, esa integración de extranjeros en las aulas y los pasillos. Me parece vital que haya pluralidad dentro de cada centro y no que sea el sistema plural por una suma de muchos centros distintos.

¿Son el euskera y el inglés incompatibles? Lo digo por el impulso al llamado modelo British que quiere dar este Gobierno de UPN y CDN que obliga casi a elegir…

Me preocupa que en Navarra, una comunidad especial en el plano lingüístico, sigamos debatiendo sobre esto. Creo que tenemos un reto de convivencia social y lingüística. Pienso que dentro de unos años Navarra va a estar orgullosa de que cada vez más gente hable castellano y euskera, aunque cueste. Pero también estaremos satisfechos si somos capaces de enseñar inglés, alemán, francés y lo que haga falta. Quiero hacer hincapié también en el francés porque es sorprendente que Navarra tenga tantos kilómetros de muga con Francia haya abandonado el francés. De todas formas, en esto de los idiomas hay como una gran preocupación entre los padres para que sus hijos aprendan idiomas y pienso que lo que hace falta no es dominar una lengua a nivel del 5º de Escuela de Idiomas o de EGA, sino unas competencias básicas para poder defenderse. El idioma hay que plantearlo así y no creando centros para competir con otros que es como muchos han recibido el British. Yo tengo que reconocer que en el inicio he sido un opositor al British sólo por cómo se estaba instalando. Se intentó una apuesta de planificación de British cuando y donde la demanda social no era ésa. Hay que estudiar la diferencia entre necesidad y demanda. En cualquier caso caminamos hacia un trilingüismo.

El bullying: ¿invento mediático o realidad en las aulas?

La convivencia, la violencia, el acoso…, son palabras que están en boca de todo el mundo. Decir que siempre ha existido – y es cierto – no es solución, pero se ha desbordado el tema. Hay quien empieza a vivir de esto. En general la convivencia en los centros escolares es bastante buena porque precisamente es el sitio donde se enseña a convivir. Los centros tienen autonomía para hacer sus planes pero hay frases redondas: Tolerancia cero . Ya, pero ¿qué hacemos con el acosador? La violencia no tiene justificación . Justificación no, pero igual sí explicación. Eso no quita para ser firmes. No se pueden buscar salidas como cambiar de centro a las víctimas y no a los acosadores. Aquí vivimos un tema impactante como la agresión a un profesor en Berriozar y Educación no estuvo a la altura.

¿Entiende la objeción de conciencia referida a Educación para la Ciudadanía?

Viví la objeción de conciencia a la mili como ciudadano y gracias a aquellos objetores (algunos pagaron con la cárcel) mi hijo no ha tenido que ir al servicio militar. Hay momentos en los que la objeción tiene justificación. Respecto al aborto, por ejemplo, es discutible que todos los médicos sean objetores porque la objeción es personal. Pero objetar sobre algo que ni siquiera ha empezado a darse, una materia… Parece más apropiado un recurso judicial. Además, la objeción debe ser individual, no la puede hacer un colegio. Y aquí se da la circunstancia de que la hace una familia en nombre de un menor. Espero que sean responsables porque privan a sus hijos de una materia aprobada oficialmente. No tiene sentido.

¿Y entiende a políticos de izquierda que llevan a sus hijos a la privada?

Conozco muy pocos políticos de izquierda. En Navarra se vive bastante bien con los problemas de redistribución de la riqueza como en otras sociedades capitalistas. Creo que cada cuál tiene derecho a llevar a sus hijos a donde quiera. La enseñanza pública es la garante de la libertad, de la igualdad y de la atención al desfavorecido, aunque hoy en día la red pública es subsidiaria de la privada. En cualquier caso, sí se cumplen los conciertos con sus obligaciones es legítimo.

Le traslado un comentario de la calle: los maestros, que son los profesionales con más vacaciones, ahora sólo quieren trabajar de mañana… ¿Qué piensa de la jornada continua, vamos?

Yo soy un gran defensor en general de los profesores y más de los funcionarios públicos que hoy en día están haciendo en Navarra una labor muy cruda. Se podría hablar casi de “misioneros laicos”. Estamos atendiendo una escuela complicada en una sociedad que está dando la espalda a los docentes. Por eso pienso que necesitamos vacaciones, aunque hay que aclarar que vacaciones vacaciones tenemos un mes, en agosto. Luego tenemos unos periodos en los que libramos y otros en los que trabajamos de otra manera, sin clases presenciales. Leemos, trabajamos en casa con nuestros equipos informáticos. Nuestro referente puede ser el de los médicos. Tenemos las vacaciones que nos merecemos y difícilmente podemos tener más horas presenciales con los alumnos porque unos y otros reventaríamos. Por otra parte pienso que las jornadas del profesorado y del alumnado no tienen porqué estar ligadas aunque en su día yo prefería dar también por la tarde. Eso sí, hay que garantizar las extraescolares y el experimento de los centros pilotos me parece de enorme riesgo. ¿Quién es el dueño de la escuela? ¿Puede decidir algo tan importante como la jornada? ¿Basta con que se pongan de acuerdo en el centro? La Administración no puede eludir su responsabilidad en un servicio público. No estoy cerrado, pero hay que hacerlo bien y sabiendo que luego se sumarán muchos centros.