Cañizares admite el uso del pañuelo si es «fundamental» para una religión

ABC, 11-10-2007

J. A.

MADRID. El cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, consideró ayer que el debate sobre el uso del velo islámico en centros escolares no se puede zanjar con «un sí o un no», sino que hay que matizarlo, porque si se considera algo «fundamental» para una religión debe admitirse.

A preguntas de los periodistas, en Talavera de la Reina, sobre este asunto, Cañizares dijo que el respeto a la libertad religiosa «es para todas las religiones», aunque puntualizó que los inmigrantes «deben asumir» las costumbres del país al que llegan sin que esto signifique que «su presencia no pueda enriquecer, y enriquece de hecho, al país que los acoge».

Para el Primado, «aquello que en las distintas religiones es fundamental como expresión, rito o manifestación religiosa debe mantenerse», y en este sentido consideró que si «para algunos sectores del Islam» el velo se considera así, «debe respetarse». Si fuera «otro móvil» ajeno al religioso el que les impulsa a llevar el velo islámico «sería algo que no tendría justificación», apostilló.

El vicepresidente de la Conferencia Episcopal precisó que «la base de la democracia está en el respeto al derecho fundamental y a la libertad religiosa, donde se asientan todos los derechos universales». A su juicio, más que dar «una respuesta de sí o no» a esta polémica, hay que dar «una respuesta mucho más matizada de lo que se está haciendo estos días».

Por otra parte, el uso del velo fue defendido ayer por la profesora marroquí y presidenta del Centro de Estudios e Investigación sobre las Mujeres, Souad Slaoui, quien participa en la Semana Intercultural de Feminismos sin Fronteras, que se celebra esta semana en la Fundación Euroárabe. La directora de este encuentro, Margarita Birriel, consideró que no hay que penalizar a las mujeres por llevar el velo islámico o la hiyab en las aulas, puesto que hay que respetar la manera en la que las mujeres musulmanas «se sienten mejor, ya sea por pudor o porque les mueva su fe religiosa».

Por el contrario, la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), una entidad católica, entiende que el uso del velo por las adolescentes no responde a criterios religiosos, sino sociales, y señala que cubrirse la cabeza u otras partes del cuerpo supone «un trato discriminatorio hacia la mujer». La CECE se refiere en un comunicado al conflicto surgido en el colegio Severo Ochoa de Ceuta, una cooperativa de trabajo asociado sin orientación religiosa que pertenece a CECE. El escrito asegura que un 87 por ciento del alumnado del centro profesa la religión musulmana, y dos alumnos forman parte del Consejo Escolar del colegio. «Nunca antes han surgido problemas de este tipo», asegura la patronal.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)