El Ararteko insta a crear planes municipales que faciliten el empadronamiento de los extranjeros

Diario de noticias de Gipuzkoa, 09-10-2007

donostia. El Defensor del Pueblo vasco (Ararteko), Iñigo Lamarca, subrayó ayer que “urge que todos los poderes públicos se pongan las pilas” en el campo de la inmigración e instó en especial a “todos los municipios” para que se doten de planes locales que faciliten “el acceso al padrón de todas las personas extranjeras”. Lamarca realizó estas declaraciones durante la presentación en Bilbao del estudio Incidencia del padrón municipal en el ejercicio de los derechos de las personas extranjeras en situación irregular , realizado por el investigador José Zarauz e impulsado por la institución del Ararteko.

“La población extranjera en Euskadi va en aumento. Su índice es todavía bajo en comparación con otras comunidades, ya que aquí ronda el 5% cuando en el Estado se sitúa en el doble. Pero sin lugar a dudas irá creciendo”, explicó el Ararteko. Además, aseguró que existe "una bolsa de sin papeles " que, según destacó, es “prácticamente imposible” de cuantificar. Según denunció, se trata de personas que no pueden acceder al padrón, lo que provoca “situaciones gravísimas de extrema exclusión social” y coloca a estas personas “en un limbo jurídico” que no permite que se reconozcan “sus derechos”.

Por ello, Lamarca recalcó “el derecho de toda persona a figurar en el padrón del municipio en el que reside” y “la obligación de todos los poderes públicos de dotar de personalidad jurídica a todas las personas residentes en un municipio”.

sin identificación José Zarauz relató que la imposibilidad de acceder al padrón municipal por parte de personas extranjeras en situación irregular incide directamente en “derechos vinculados con la integración como los sanitarios, educativos o los relacionados con la protección social, como sería el caso de la percepción de la Renta Básica”. Sostuvo, además, que las causas de esa imposibilidad son principalmente “la carencia de documentación identificativa”, un problema más acusado “entre magrebíes y subsaharianos”, y “la carencia de un alojamiento donde empadronarse”.

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