Año y medio después de que se firmara el Pacte Nacional de Catalunya para lograr, en seis años, la plena equiparación en derechos y deberes de las escuelas públicas y concertadas, aquel compromiso ha perdido vigor. La anemia se detecta en diferentes partes de la musculatura. El grueso de los 750 colegios concertados siguen instalados en la queja porque no han visto mejorada su financiación como ansiaban. Y tampoco la atisban en el horizonte.
En el camino de las obligaciones, el avance es igual de lento. No parece que se haya acortado la distancia que separa la cifra de inmigrantes escolarizados en una u otra red, que siguen agrupándose desordenadamente en la pública. Por añadidura, una minoría de concertadas sigue haciendo “trampas” (por usar una definición que hizo fortuna en su día por proceder del expresident Pujol), sin que esa lacra haya podido erradicarse. Las razones son varias. La ministra de Educación, Mercedes Cabrera, piensa que la existencia de fraudes, como el cobro de cuotas no autorizadas, “se basa con frecuencia en el desconocimiento de los padres. Muchos creen que es perfectamente legal lo que no lo es”.

DESPEJAR DUDAS
Cabrera admitió el jueves, durante una entrevista, que la normativa básica ha de mejorar para poder despejar las dudas de los padres. “Reconozco que hay mucho que hacer ahí, pero de entrada se ha de cumplir la ley”. “Hay una enorme variedad de situaciones y en algunos casos se abusa de la flexibilidad con la que se aplican los conciertos”. Pero, a renglón seguido, recordó que “a las comunidades autó –
nomas les incumbe controlar que se cumpla, por ejemplo, el principio de responsabilidad compartida entre la pública y la concertada en la escolarización de niños y jóvenes con necesidades especiales”. O sea, los extranjeros sin recursos.
La ministra dice estar predispuesta a discutir las adaptaciones necesarias para mejorar la financiación de la concertada. Hacerla más a la carta, individualizándola según las características del centro, podría beneficiar a buena parte del colectivo. Esa es una de las vías a explorar.