Hoy se celebran las primeras jornadas de puertas abiertas de la Iglesia Evangélica. El lema, Por la integración, aspira a divulgar su labor social y espiritual con los nuevos madrileños originarios de Latinoamérica y Rumanía. Las distintas iniciativas desarrolladas en este área han contribuido a que, sólo en Madrid, ya superen los 20.000 devotos.

Las jornadas se celebran en la plaza de España hasta las 22.00 horas. Se han levantado 35 stands que albergan a otras tantas variantes de una fe que se caracteriza por la autonomía que reciben sus ministros. Iglesias como la Pentecostal de Salem, los Gedeones Internacionales y la Sociedad Bíblica conforman las distintas caras de la religión evangélica, que encuentra sus bases en las creencias protestantes. Cada año ven cómo aumentan sus adeptos, no sólo en la capital de España, sino también en el conjunto del país, donde ya superan los 400.000 fieles.

Madrid alberga 300 parroquias que dan servicio a devotos de todas las partes del mundo. «La Iglesia Evangélica está muy extendida en todo el globo. En algunos países, como Guatemala, llega al 40% de la población», explicó Alvaro López, pastor de la Comunidad Cristiana Casa de Bendición en el barrio de Canillejas.

El Consejo Evangélico de Madrid desea hacerse visible y dejar de ser un desconocido para una gran parte de la población. En esta ocasión, las actividades que pretenden destacar son los esfuerzos desarrollados desde hace años para ayudar a los extranjeros, que acuden a Madrid en busca de un porvenir.

«Ofrecemos ayuda a los inmigrantes, drogadictos, ancianos y gente vulnerable en general. Damos asesoramiento legal y espiritual, repartimos raciones de comida, organizamos capellanías en prisiones y hospitales, entre otras actividades», explicó Pablo González, presidente de Diaconía Madrid – el equivalente de Cáritas en la Iglesia Evangélica – .

El consejero de Inmigración de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández – Lasquetty, asistió al acto de inauguración de las jornadas. «Se han abierto 50 nuevas iglesias evangélicas impulsadas por foráneos. Están haciendo un gran trabajo con los inmigrantes de segunda generación y con las mujeres», destacó.

Por otra parte, las iglesias compuestas por extranjeros han dado a luz un nuevo fenómeno. Desde el Consejo Evangélico han observado la creación de «iglesias étnicas», donde sus integrantes son de un mismo país y celebran los oficios en su lengua de origen. De este modo, hay cultos rumanos y africanos.