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Agentes federales que allanaron once locales McDonalds en el norte de Nevada detuvieron a más de 40 personas como parte de una ofensiva contra la inmigración ilegal.

Agentes de Inmigración y Aduanas (ICE) efectuaron las detenciones en Reno, Sparks y Fernley tras los allanamientos en los restaurantes y una oficina de la empresa en Reno, dijo el vocero Richard Rocha.

“Son personas sospechosas de encontrarse en el país ilegalmente. Que yo sepa, todos eran empleados de McDonalds”, aseguró el vocero.

Rocha se negó a identificar al dueño o dueños de las franquicias.
Señaló que los detalles de la investigación se encuentran en documentos sellados de la justicia federal.

Una vocera de McDonalds Corp., con sede en Oak Brook, Illinois, indicó que la empresa emitiría un comunicado.

Dirigentes hispanos y representantes de la Unión Estadounidense de Libertades Cívicas (ACLU) convocaron a una conferencia de prensa.

La indagación  comenzó hace cinco meses a raíz de una denuncia de robo de identidad, dijo Rocha. La policía local informó a la ICE que había inmigrantes indocumentados en determinados restaurantes McDonalds.

“Es una investigación con blancos concretos. Esos lugares son blancos.
La ICE no hace allanamientos al azar”, dijo.