La Policía continúa la búsqueda «por tierra, mar y aire» del buque nodriza que el pasado fin de semana lanzó a más de 40 inmigrantes a las costas de Alicante, en la primera oleada de sin papeles que llega de esta manera a la región.

Según indicó ayer la subdelegada del Gobierno en la provincia, Encarna Llinares, las Fuerzas de Seguridad «han extremado los controles» en la zona, que está siendo peinada por helicópteros y varios barcos.

La existencia de una embarcación de gran tamaño que trasladó a los inmigrantes durante la mayor parte de la travesía por el Mediterráneo y que, una vez situada frente a la costa, los embarcó en pateras hacia las costas sigue siendo una hipótesis. Sin embargo, Llinares apuntó ayer a que «todo hace suponer que un barco nodriza les iba lanzando».

En efecto, esa tesis es la más probable. Tal y como explicó la subdelegada del Gobierno, circunstancias como que los sin papeles llegaran «en el mismo día y en el mismo tipo de embarcación», o que los seis que fueron localizados en Benidorm se encontraran en «perfectas condiciones de salud», demostrarían «que los dejaron a muy pocos metros de la costa».

Asimismo, Llinares destacó que «era previsible que este tipo de inmigración llegara a la provincia de Alicante, puesto que recientemente había alcanzado Murcia».

Llegadas anecdóticas

En este sentido se pronunció también la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, que confirmó que el Gobierno ha constatado un desplazamiento de las mafias que trafican con sin papeles hacia las costas de Levante. «Mientras los controles van dando resultado y se es más eficaz, se idean nuevas rutas donde todavía no existe control SIVE [Sistema Integrado de Vigilancia Exterior]», se lamentó Rumí.

No obstante, la secretaria de Estado advirtió que, de momento, los esfuerzos del Ejecutivo se centrarán «en Canarias, el Estrecho de Gibraltar y Almería», ya que las llegadas a Alicante y Murcia todavía «son anecdóticas».

Precisamente, en Almería y Canarias también se detectó ayer más presencia de pateras. En la provincia andaluza, la Guardia Civil encontró un cadáver en un arenal de Níjar (cabo de Gata), que podría proceder de una embarcación que naufragó el domingo en la zona.

En Canarias, Salvamento Marítimo localizó e interceptó ayer una embarcación al sur de la isla de El Hierro, en la que viajaban 102 personas, que fueron trasladadas al puerto de La Restinga.

Por otra parte, el buque Río Miño de la Guardia Civil partió el sábado desde las islas Canarias y está previsto que llegue hoy a las costas de Senegal, donde realizará labores de vigilancia, intentando detectar la salida de cayucos.