La única víctima del tiroteo que aún permanecía con vida pereció ayer por la mañana en el Hospital Carlos Haya. Su muerte eleva a tres los fallecidos en el tiroteo que ocurrió el pasado martes en la zona de Torreblanca, en Fuengirola.

La víctima, de nacionalidad colombiana y de 28 años, llevaba cuatro días ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) a consecuencia de los impactos de bala que recibió, al parecer, a la altura del tórax y del abdomen.

La primera de las víctimas, un hombre de nacionalidad ecuatoriana, murió en el acto, mientras que el segundo fallecido, un colombiano, murió en el Hospital Costa del Sol de Marbella en la madrugada del pasado miércoles.

La policía detuvo por este caso a Alexander J. B., de 27 años, quien se entregó en la noche del miércoles en la comisaría de Fuengirola. De hecho, se encuentra en prisión provisional por el caso. Fuentes penitenciarias confirmaron que el arrestado está en el módulo de ingresos de la cárcel de Alhaurín de la Torre.

Alexander J. B., que era cuñado de una de las víctimas en el tiroteo, ya estuvo en prisión hace aproximadamente siete años por un presunto delito contra la salud pública, según estas mismas fuentes.

Vehículo interceptado

En relación con este caso, el miércoles se localizó en el centro de Málaga capital un vehículo que era buscado por los investigadores, un BMW X5 de color azul. Fuentes próximas a la investigación indicaron que este sería el vehículo que habitualmente utilizaba Alexander J.B, aunque no estaba a su nombre.

Al interceptar el todoterreno, la Policía Local de Málaga arrestó a dos personas de origen colombiano que, según las fuentes, no se consideran sospechosos de participar en el tiroteo. No obstante, quedaron detenidos por otros motivos no precisados.

El Cuerpo Nacional de Policía baraja como hipótesis sobre el móvil del tiroteo un ajuste de cuentas por narcotráfico o la rivalidad entre bandas.

Una vecina de la urbanización en cuya entrada se produjo el tiroteo explicó a Efe que uno de los presuntos agresores estaba de pie en la entrada del garaje del recinto y cubría su cabeza con un casco de motocicleta, mientras que el otro aguardaba montado en una moto en marcha, al parecer de color negro.

En ese momento, llegaron a la urbanización en un Seat Ibiza de color gris los tres hombres que resultaron víctimas del tiroteo pasadas las 22.00 horas, tras lo cual uno de ellos gritó pidiendo auxilio mientras los presuntos agresores huían.