Es la primera vez, al menos que haya trascendido a la opinión pública, que llegan inmigrantes a bordo de pateras. Fuentes conocedoras del caso están convencidas, a pesar de que no hay todavía confirmación oficial, de que se produjo el aluvión a la costa alicantina, murciana y granadina desde un barco nodriza.

Varios vecinos de Pilar de la Horadada expresaron ayer su sorpresa por la llegada de una patera a la cala de Rocamar y aseguraron que de madrugada oyeron ruido en la zona, pero no imaginaron que se tratara de una patera con inmigrantes, sino de alguna fiesta en la playa.

Como él, otros vecinos de las casas situadas en la zona escucharon ruido de pasos apresurados y voces en las inmediaciones. En declaraciones a Efe Televisión, María, una murciana propietaria de una casa en la playa, relató que a las 04.45 horas “había mucho lío” en la playa y pensó que podría ser “algún vecino que estaba por ahí de fiesta”.

Aseguró que ella no vio a ninguno de los supuestos inmigrantes que llegaron en la patera, solo los oyó, pero cuando le dijeron esta mañana de dónde procedían los ruidos y vio en la playa la embarcación con los restos de comida, las ropas mojadas, los medicamentos y botellas de agua, no lo podía creer. “Yo no me imaginaba que fuera esto. Pensé que era un vecino con la novia, pero ya decía yo que no era normal tanto jaleo”, añadió esta vecina, que dijo que “estas cosas estamos acostumbrados a verlas en otras zonas, pero no aquí”.

Otro vecino de la playa, Ignacio Ibabe, también se sorprendió cuando vio a los agentes de la Guardia Civil en la playa y la “patera con bidones de gasolina, un pan de campo medio comido y unas botellas de agua sin gas de medio litro con las etiquetas en árabe”.

La alcaldesa del Guardamar, Marylene Albentosa, explicó a Efe que hubo testigos que vieron cómo “personas salían del barco y entraban corrían a tierra”, hacia una zona de pinar situada junto a la playa.

Albentosa indicó que se trata “de la primera vez que sucede esto por esta zona” Según indicó la alcaldesa, los agentes de la Guardia Civil podrían haber localizado a uno de los ocupantes de la embarcación, aunque la Guardia Civil no confirmó este extremo.