Las comunidades gobernadas por el PP reclamaron ayer en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que el Ejecutivo, a la hora de abordar la revisión del modelo de financiación autonómica, tenga en cuenta el impacto de la inmigración en las cuentas públicas.

En la reunión, los consejeros autonómicos del área y el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, analizaron, entre otras cuestiones, el grado de cumplimiento de los objetivos de equilibrio presupuestario marcados para 2006, y los resultados del informe sobre el impacto de la población inmigrante en la financiación autonómica de cara a su futura reforma.

La postura del PP en este último punto fue defendida por el consejero económico de la Comunidad Valenciana, Gerardo Camps, quien afirmó que «no tener en cuenta el importante incremento de población inmigrante» de los últimos años en algunas comunidades supone «cerrar los ojos a las mayores necesidades de gasto social, sobre todo en sanidad y educación».

Por su parte, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, abogó porque la financiación autonómica surja «del consenso» y apostó porque el nuevo modelo tenga en cuenta «las leyes que se han ido aprobando, como las reformas estatutarias que se han impulsado».

Mientras, las CCAA de Cantabria y La Rioja fueron las únicas que incumplieron los objetivos de estabilidad presupuestaria en 2006 al registrar un déficit del 0,01% del PIB cuando estaban obligadas a obtener un equilibrio. Otras como Cataluña, Castilla – La Mancha y Baleares también registraron déficit, aunque les estaba permitido, informa Efe.