Un pesquero rescató en la madrugada del viernes al sábado a un argelino residente en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) cuando pretendía alcanzar a nado las costas peninsulares. El magrebí iba provisto de un traje de neopreno cuando fue encontrado por la embarcación pesquera, que acabó entregándolo a los agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

En un principio desde el instituto armado se cree que el ciudadano argelino había iniciado su viaje no sólo con el traje de neopreno, sino también con un flotador o una tabla de windsurf que le sirviera para descansar durante la travesía, aunque cuando fue encontrado no se halló ningún elemento que le facilitara la arriesgada travesía.

El argelino había iniciado su viaje desde la zona comprendida entre las playas de Benítez y Benzú, pero no había acudido solo. El inmigrante había ido acompañado de un extranjero de su misma nacionalidad, que al parecer no se atrevió a iniciar la travesía, que sí comenzó su compañero. Pero el inmigrante rescatado por el pesquero creyó que su amigo había seguido sus pasos, de modo que cuando fue rescatado dijo a los pescadores que no sabía dónde estaba el compañero que se había lanzado al mar con él.

El pesquero alertó al Centro Zonal de Salvamento Marítimo de Tarifa, desde donde se dio aviso a las embarcaciones que transitaban por la zona. Así, se inició un dispositivo de búsqueda por parte de la Guardia Civil para intentar localizar al inmigrante que supuestamente se había lanzado al mar con el compañero rescatado.

Estaba en el CETI

El aviso y las tareas de búsqueda quedaron suspendidas sobre las 11.00 horas de ayer, cuando desde el CETI se anunció a la Guardia Civil que el inmigrante que se estaban buscando estaba en la centro del Jaral. Al parecer, según manifestaron fuentes de la Guardia Civil, el inmigrante no se había atrevido a iniciar la travesía, a la que sí se había aventurado finalmente su compañero.

El aviso de «hombre al agua» dado por Tarifa Tráfico hizo pensar que la búsqueda podía tener relación con el naufragio del pesquero de Barbate ‘Nuevo Pepita Aurora’. Y es que aún se sigue buscando los cuerpos de cuatro pescadores desaparecidos después de que ayer se hallara en el interior de la embarcación el cadáver de uno de ellos.

El inmigrante argelino que inició la travesía se encuentra en buen estado de salud y ya ha sido devuelto al CETI.

Este tipo de intento para alcanzar la Península no es único. Hace aproximadamente un mes cuatro inmigrantes intentaron también cruzar el Estrecho provistos de trajes de neopreno y dos tablas de windsurf.