El Gobierno canario pidió ayer que la tutela de los menores no acompañados que llegan a España en cayucos y pateras sea de la Administración estatal y que sobre las comunidades autónomas recaiga la responsabilidad de acogerlos.

Así lo solicitó el consejero de Presidencia, Justicia y Seguridad del Ejecutivo regional, José Miguel Ruano, quien, en calidad de portavoz del Gobierno en funciones, manifestó el “disgusto” que tiene la administración autonómica por los “incumplimientos” en los que ha incurrido el Gobierno que preside Zapatero.

Ruano afirmó que en septiembre de 2006 el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, se comprometió a que Canarias no acogería nunca a más de 300 menores no acompañados y destacó que, en la actualidad las Islas albergan a unos 700 chicos.

Recalcó que, el año pasado, se instó al Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales a que “propiciara una solución”.