Un bebé de once meses ingresó ya muerto el sábado a primera hora de la tarde en el hospital Sant Joan de Reus. Por el aspecto que presentaba la criatura, que tenía varias contusiones por todo el cuerpo, los médicos sospecharon que había sido víctima de malos tratos, activaron el protocolo establecido en estos casos y dieron parte al juzgado. La Policía Nacional detuvo ayer al compañero sentimental de la madre del bebé, L. G. R., un joven de 18 años y de origen dominicano, quien, al parecer, estaba al cuidado del bebé cuando pereció.

El pequeño fue trasladado en ambulancia desde su casa hasta el hospital anteayer a las 15 horas. Pese a los intentos de reanimación de los facultativos del Servei d¿Emergències Mèdiques (SEM), el bebé llegó ya sin vida al centro sanitario. Según informaron ayer fuentes policiales, la madre del pequeño, también de origen dominicano, había dejado a su hijo, al que tuvo con 17 años en una relación anterior, al cuidado de su pareja – con quien vive en la calle Maria Antònia París de Reus y de quien estaría embarazada de unos meses- mientras ella iba a visitar a su madre.

Los médicos concluyeron que el pequeño había tenido una “muerte traumática” y sospecharon, por las múltiples contusiones que había sufrido, que podía tratarse de malos tratos. La explicación que dio el joven ahora detenido, quien aseguró que el bebé había caído, no justificaba, en opinión de los médicos, las lesiones que detectaron en el cuerpo del pequeño por lo que activaron el protocolo de malos tratos y dieron aviso al juzgado de guardia.

Según fuentes policiales la madre del pequeño declaró que su pareja no podía ser el autor de aquellos golpes y la misma tarde del sábado medio centenar de amigos y familiares del ahora detenido se concentraron en las puertas de urgencias del hospital Sant Joan de Reus, ubicado en el centro de la ciudad, defendiendo su inocencia y mostrando su malestar por la actuación de los médicos del hospital. Para evitar que los nervios y la tensión derivaran en algún incidente, la Guardia Urbana realizó tareas de vigilancia pero no llegó a producirse altercado alguno.

Con los primeros informes forenses y la investigación en marcha, agentes de la Policía Nacional detuvieron ayer al compañero sentimental de la madre del pequeño como presunto autor de los golpes que habrían producido la muerte al bebé, aunque las investigaciones siguen abiertas. A la espera de los resultados de la autopsia, la titular del juzgado de instrucción número 3 de Reus, encargada del caso, ha decretado el secreto de sumario.

La noticia sacudió ayer a los vecinos de la joven pareja y se desataron todo tipo de comentarios. La policía investiga ahora si el joven estaba solo con el pequeño o si había más gente cuando el bebé recibió supuestamente los golpes que le produjeron la muerte y si la criatura había sido antes víctima de malos tratos. Este trágico suceso se produce apenas tres meses después del caso de Claudia, la niña de Salou maltratada en varias ocasiones, razón por la que su padre permanece en prisión preventiva. El fiscal ha solicitado para él una pena de cuatro años de prisión por un presunto delito de lesiones y ha exculpado a la madre de toda responsabilidad.