La comunidad indocumentada de Los Ángeles ganó un punto a su favor con la decisión del Departamento de Policía de suspender el decomiso de autos a los conductores que sean detenidos por conducir sin licencia de manejar.

La norma advierte que los agentes no se incautarán de los autos de personas que manejen sin licencia, siempre y cuando una persona con este documento pueda conducirlo. La moratoria se dio hasta definir la posición de la ciudad sobre una decisión dada por la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito en Oregon.

En ese caso el juez determinó que era inconstitucional retener el vehículo cuando el único delito era manejar sin la licencia.

Para Jorge Mario Cabrera, vocero de NALACC, esta es una pequeña victoria para la comunidad inmigrante que tenía que pagar miles de dólares para poder recuperar sus carros después de 30 días de decomiso: Esperamos que este sea el primer paso, y el definitivo sea otorgarle licencia de conducir a los indocumentados.

Aunque la decisión no será acatada por los alguaciles del condado y agentes de la Patrulla de Caminos, cientos de compatriotas se verán beneficiados por esta iniciativa.