| SAN LORENZO, Esmeraldas

Una disculpa ofrecieron las autoridades colombianas por los desplazados.

Los 1.500 desplazados colombianos, que desde el pasado miércoles 22 permanecen en este cantón, emprenderán hoy a partir de las 06:00 el retorno a sus comunidades.

Ese fue el principal acuerdo entre los dirigentes de los desplazados y una delegación del Gobierno de Colombia, que mantuvieron una reunión que se prolongó siete horas.

La comitiva de autoridades del vecino país ofreció disculpas a Ecuador y reiteró que se darán todas las garantías para el retorno de las familias hacia Colombia.

El acta firmada entre los delegados del Gobierno colombiano y los desplazados señala, además, la disposición de ambas partes de retomar las mesas de negociación y de buscar la canalización de proyectos productivos a favor de los cultivadores de coca.

“Pudieron haber errores en la organización de las mesas de diálogo entre gobierno y los campesinos. Vamos a hacer lo posible porque el proceso se cumpla y no se vuelvan a generar molestias”, afirmó, al tiempo de pedir disculpas, Jaime Avendaño, director de atención de emergencias de la Presidencia de Colombia y quien presidió una delegación de cinco personas.

Para la firma del acuerdo de ayer, que consta de cuatro puntos, fueron necesarios siete días de crisis humanitaria que soportó San Lorenzo, al recibir en forma intempestiva a 1.553 refugiados. Según informes de la Defensa Civil, el país debió gastar un promedio de 60 mil dólares diarios para atender a los desplazados.

Inicialmente estos dijeron que huían de los combates entre el Ejército nacional y grupos irregulares en su país.

Recién el lunes, una decena de dirigentes entregó un comunicado a las autoridades ecuatorianas en el que dieron a conocer que su presencia fue planificada para llamar la atención del gobierno de su país y pedir la suspensión temporal de la erradicación manual de plantaciones de coca.

Edward Cortez, representante de los desplazados y quien preside la organización de campesinos de los ríos Mira, Nulpi y Mataje (Minuma), pidió disculpas ayer por las molestias que generó en Ecuador la movilización y agradeció por el apoyo a los campesinos.

El acta también contempla el compromiso de los desplazados de volver a sus veredas y la garantía del Ejército colombiano para dar seguridad.

La comitiva del vecino país llegó en un helicóptero militar desde Tumaco y tardó casi siete horas para lograr el acuerdo. El alcalde de San Lorenzo, Gustavo Samaniego, participó de la cita únicamente como testigo, pues el problema competía directamente a las autoridades y pobladores colombianos.

Avendaño aclaró, eso sí, de que en ningún momento Colombia iba a interrumpir el proceso de erradicación de las plantaciones de coca en la frontera, como pedían los campesinos movilizados. Solo garantizó que habrá un diálogo más fluido entre las partes.

¿Qué garantiza ahora de que los campesinos agrupados en Minuma no retomen su protesta y otra vez usen a Ecuador para –como esta vez– pedir atención de Colombia? “Lo que debemos es valorar la palabra de los directivos. De nuestra parte hay el compromiso de atenderlos”, respondió Avendaño, quien ofreció una rueda de prensa conjunta con ellos, en la Base Naval de San Lorenzo, sede de la cita colombiana.