El tema migratorio, sujeto a cálculo político: congresistas

El Universal, Natalia Gómez Quintero, 30-08-2007

Para los legisladores estadounidenses tanto demócratas como republicanos, el tema de la reforma migratoria no escapa a los manejos electorales, porque “todo es cálculo político” y por ello aceptan que es muy difícil reposicionar el asunto antes de que termine la administración del presidente George W. Bush. Sin embargo, de algo no tienen duda: se necesita de esa mano de obra para acelerar la economía de Estados Unidos.

Los congresistas Steve King, Zoe Lofgren y Ciro Rodríguez, así como Dean Aguillen, de la oficina del vocero de la Asamblea de Representantes, fueron entrevistados por EL UNIVERSAL en el marco de una visita no oficial que realizaron a México invitados por el Instituto México del Woodrow Wilson International Center for Scholars, para reunirse con sus contrapartes mexicanas, académicos y periodistas, ay con el procurador general de la República Eduardo Medina Mora.

La posición más estricta fue la del congresista republicano por Iowa, Steve King, quien describe que una amnistía a transgresores de la ley de inmigración “sería recompensarlos con el objetivo de su crimen”.

Asegura que en estricto sentido, los indocumentados son criminales, porque trasgreden las leyes migratorias, y defiende: “Ninguna nación debe ofenderse por la construcción de muros, pues cada gobierno debe controlar su flujo migratorio”.

Advierte, además, que el flujo de grandes proporciones de indocumentados, sin duda anima a los traficantes de droga a entrar a su país, donde muchos estadounidenses se convierten en víctimas de este crimen.

Esta línea dura hace un contrapeso con las posiciones de los congresistas demócratas Zoe Lofgren, por California, y Ciro Rodríguez, así como Dean Aguillen, quienes coinciden en que la reforma migratoria aún no esta “muerta”, y que cualquier legislación aprobada en cuestión migratoria o de seguridad tendrá que respetar los derechos humanos tanto para los estadounidenses como para los trabajadores migrantes.

No son criminales

Para Dean Aguillen, los migrantes no pueden ser considerados criminales y mucho menos al nivel de terroristas o narcotraficantes como amenaza a la seguridad de Estados Unidos; “la seguridad fronteriza es importante, pero también la mayoría de los inmigrantes provenientes de México llevan grandes beneficios económicos y francamente, la economía estadounidense no funcionaría igual sin ellos”.

“Ciertamente, los Estados Unidos están más preocupados desde los atentados del 11 de septiembre, pero no hay ninguna conexión entre los terroristas y los migrantes, según los informes que tengo. Creo que es necesario que nos movamos en torno a un plan migratorio, a fin de que no entre gente mala de manera ilegal” agrega Lofgren.

Los entrevistados coinciden en que la cooperación bilateral en el ámbito de seguridad y, sobre todo si llegara a concretarse una reforma migratoria, debería ser más estrecha.

Ciro Rodríguez, de origen mexicano, adelanta que podrían modificarse ciertos aspectos de las leyes migratorias, pero insiste: “Necesitamos un plan migratorio comprensivo”, en el que la construcción de una valla fronteriza no sea lo necesario.

“El muro es un símbolo negativo, no sólo para México sino también para el mundo”, comenta.

Para Lofgren, la tecnología en la frontera es más funcional: “Hemos tenido pláticas sobre el flujo de drogas y en ese sentido el muro ayuda, pero creo que hay otras maneras más amables para resolver los problemas de inmigración con México”.

Para los legisladores estadounidenses tanto demócratas como republicanos, el tema de la reforma migratoria no escapa a los manejos electorales, porque “todo es cálculo político” y por ello aceptan que es muy difícil reposicionar el asunto antes de que termine la administración del presidente George W. Bush. Sin embargo, de algo no tienen duda: se necesita de esa mano de obra para acelerar la economía de Estados Unidos.

Los congresistas Steve King, Zoe Lofgren y Ciro Rodríguez, así como Dean Aguillen, de la oficina del vocero de la Asamblea de Representantes, fueron entrevistados por EL UNIVERSAL en el marco de una visita no oficial que realizaron a México invitados por el Instituto México del Woodrow Wilson International Center for Scholars, para reunirse con sus contrapartes mexicanas, académicos y periodistas, ay con el procurador general de la República Eduardo Medina Mora.

La posición más estricta fue la del congresista republicano por Iowa, Steve King, quien describe que una amnistía a transgresores de la ley de inmigración “sería recompensarlos con el objetivo de su crimen”.

Asegura que en estricto sentido, los indocumentados son criminales, porque trasgreden las leyes migratorias, y defiende: “Ninguna nación debe ofenderse por la construcción de muros, pues cada gobierno debe controlar su flujo migratorio”.

Advierte, además, que el flujo de grandes proporciones de indocumentados, sin duda anima a los traficantes de droga a entrar a su país, donde muchos estadounidenses se convierten en víctimas de este crimen.

Esta línea dura hace un contrapeso con las posiciones de los congresistas demócratas Zoe Lofgren, por California, y Ciro Rodríguez, así como Dean Aguillen, quienes coinciden en que la reforma migratoria aún no esta “muerta”, y que cualquier legislación aprobada en cuestión migratoria o de seguridad tendrá que respetar los derechos humanos tanto para los estadounidenses como para los trabajadores migrantes.

No son criminales

Para Dean Aguillen, los migrantes no pueden ser considerados criminales y mucho menos al nivel de terroristas o narcotraficantes como amenaza a la seguridad de Estados Unidos; “la seguridad fronteriza es importante, pero también la mayoría de los inmigrantes provenientes de México llevan grandes beneficios económicos y francamente, la economía estadounidense no funcionaría igual sin ellos”.

“Ciertamente, los Estados Unidos están más preocupados desde los atentados del 11 de septiembre, pero no hay ninguna conexión entre los terroristas y los migrantes, según los informes que tengo. Creo que es necesario que nos movamos en torno a un plan migratorio, a fin de que no entre gente mala de manera ilegal” agrega Lofgren.

Los entrevistados coinciden en que la cooperación bilateral en el ámbito de seguridad y, sobre todo si llegara a concretarse una reforma migratoria, debería ser más estrecha.

Ciro Rodríguez, de origen mexicano, adelanta que podrían modificarse ciertos aspectos de las leyes migratorias, pero insiste: “Necesitamos un plan migratorio comprensivo”, en el que la construcción de una valla fronteriza no sea lo necesario.

“El muro es un símbolo negativo, no sólo para México sino también para el mundo”, comenta.

Para Lofgren, la tecnología en la frontera es más funcional: “Hemos tenido pláticas sobre el flujo de drogas y en ese sentido el muro ayuda, pero creo que hay otras maneras más amables para resolver los problemas de inmigración con México”.

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