El presidente Felipe Calderón se comprometió a revisar el caso de la mexicana repatriada de Estados Unidos, Elvira Arellano, quien le pidió interceda por ella a fin de obtener una visa diplomática que le permita regresar a aquella nación y reunirse con su hijo.

En el encuentro con el mandatario, la migrante deportada le pidió a Calderón Hinojosa se revise la posibilidad de que la visa no sea sólo como turista o temporal, sino que se busque el mecanismo para que reciba un nombramiento diplomático y no se le rechace la entrada.

“Le pedí que me ayudara y aproveché y le dije que me dé un nombramiento de diplomática como embajadora de paz, buena voluntad y esperanza para los migrantes”, comentó en una entrevista radiofónica más tarde.

Dijo que el Presidente se comprometió a hacer “todo lo humanamente posible. Él dijo que harían lo que estuviera en sus manos para ayudar en mi caso”.

Calderón, quien recibió a Arellano en Los Pinos, le dio instrucciones a la canciller Patricia Espinosa para que revisaran la solicitud.

El mandatario expresó su solidaridad con la situación que vive la migrante mexicana, quien después de permanecer un año refugiada en una iglesia de Los Ángeles fue deportada a México.

En el encuentro con Calderón estuvo presente Marta Sánchez Soler, integrante del Movimiento Migrante Mesoamericano, quien acompaña a Elvira Arellano.

Más tarde, Calderón se reunió con el gobernador de Texas, Rick Perry, a quien le expuso “la importancia de que se redoblen los esfuerzos que permitan un flujo legal, seguro y respetuoso de derechos humanos de los migrantes” .

Coincidió con Perry en que la construcción de un muro fronterizo no ayuda a solucionar el problema migratorio, pero también le expresó “la importancia de que su gobierno acepte plenamente el uso de la matrícula consular expedida por las representaciones mexicanas”.

El presidente Felipe Calderón se comprometió a revisar el caso de la mexicana repatriada de Estados Unidos, Elvira Arellano, quien le pidió interceda por ella a fin de obtener una visa diplomática que le permita regresar a aquella nación y reunirse con su hijo.

En el encuentro con el mandatario, la migrante deportada le pidió a Calderón Hinojosa se revise la posibilidad de que la visa no sea sólo como turista o temporal, sino que se busque el mecanismo para que reciba un nombramiento diplomático y no se le rechace la entrada.

“Le pedí que me ayudara y aproveché y le dije que me dé un nombramiento de diplomática como embajadora de paz, buena voluntad y esperanza para los migrantes”, comentó en una entrevista radiofónica más tarde.

Dijo que el Presidente se comprometió a hacer “todo lo humanamente posible. Él dijo que harían lo que estuviera en sus manos para ayudar en mi caso”.

Calderón, quien recibió a Arellano en Los Pinos, le dio instrucciones a la canciller Patricia Espinosa para que revisaran la solicitud.

El mandatario expresó su solidaridad con la situación que vive la migrante mexicana, quien después de permanecer un año refugiada en una iglesia de Los Ángeles fue deportada a México.

En el encuentro con Calderón estuvo presente Marta Sánchez Soler, integrante del Movimiento Migrante Mesoamericano, quien acompaña a Elvira Arellano.

Más tarde, Calderón se reunió con el gobernador de Texas, Rick Perry, a quien le expuso “la importancia de que se redoblen los esfuerzos que permitan un flujo legal, seguro y respetuoso de derechos humanos de los migrantes” .

Coincidió con Perry en que la construcción de un muro fronterizo no ayuda a solucionar el problema migratorio, pero también le expresó “la importancia de que su gobierno acepte plenamente el uso de la matrícula consular expedida por las representaciones mexicanas”.