Zapatero «lamenta amargamente» la regularización, según el primer ministro francés

Diario de Navarra, EFE. PARÍS., 28-08-2007

El primer ministro francés, François Fillon, defendió ayer las expulsiones de inmigrantes indocumentados ante las críticas de asociaciones sociales y tras los recientes incidentes en los vuelos de repatriación de ilegales. «No hay otra solución. Francia no puede acoger a toda la gente que quiere entrar» en su territorio, aseguró.

Tras señalar que lo mismo se aplica a «todos» los demás países europeos, dijo que el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, con el que se reunió a finales de julio, «lamenta amargamente» haber regularizado a «cientos de miles» de inmigrantes ilegales y «se ha comprometido a no hacerlo de nuevo».

«Un gran éxito»

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, defendió que la regularización de trabajadores inmigrantes que el Gobierno de Zapatero realizó al comienzo de su mandato fue «un gran éxito reconocido por muchos países», y es un «modelo porque se realizó a través del diálogo y respetando los acuerdos con todos los agentes sociales y económicos».

El ministro subrayó que «lo más importante» de la decisión que tomó en aquel momento su Gobierno fue que se convirtió en «legales a aquellos que trabajaban para el desarrollo económico y social de España y que, sin embargo, eran tratados como no ciudadanos», apuntó.

Por su parte, el secretario de Comunicación del PP, Gabriel Elorriaga, pidió al Gobierno que las «explicaciones y excusas» que ofrece a otros ejecutivos europeos las convierta en una «disculpa» a los ciudadanos españoles.

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