El delegado del gobierno calificó de “dantesco” el hecho de que once inmigrantes fueran arrojados por la borda tras haber fallecido durante la travesía al intentar arribar a las costas canarias. Asimismo, manifestó que “es razonable que estas personas quieran buscar otros horizontes vitales donde poderse desarrollar”.
Ante los últimos intentos de varios subsaharianos de alcanzar las costas del Archipiélago, el delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, manifestó esta mañana que lo que siente ante la llegada de un nuevo cayuco con inmigrantes a bordo es “alegría porque al menos esos jóvenes que han llegado a Arguineguín o a Los Cristianos han salvado la vida”.

Segura calificó de “dantesca” la tragedia protagonizada por los inmigrantes ilegales que fueron rescatados el pasado domingo por un pesquero a 80 millas al sureste de Fuerteventura. Según los subsaharianos que sobrevivieron a la travesía, once de las personas que viajaban en el cayuco fallecieron a consecuencia del viaje y fueron arrojados por la borda.

El delegado del Gobierno reconoció la labor de los tripulantes de este pesquero y de los helicópteros que intervinieron en el rescate por “dar una lección de solidaridad, de humanidad, de fortaleza física y psíquica salvando a estos pobres seres humanos”.

José Segura explicó que “el fenómeno de la inmigración sigue estando ahí y el Gobierno de España hace lo que puede”. Según afirmó: “lo que hace el Gobierno de España es salvar vidas en la mar, y mientras el fenómeno siga tenemos que esforzarnos al máximo en conseguir eso”.

Además, señaló que “decenas de millones de seres humanos en el continente africano sobreviven diariamente con una cantidad inferior a un euro, por lo que parece razonable que muchos de esos seres humanos, jóvenes, quieran buscar otros horizontes vitales donde poderse desarrollar”.

El delegado del gobierno informó que ya están preparadas las instalaciones de la isla de La Gomera en la zona de El Camello para dar alojamiento a unos 300 inmigrantes ilegales. Asimismo, señaló que los módulos que se han fabricado en el municipio de Valverde, en la isla de El Hierro, son equivalentes a los de La Gomera para dar atención inmediata a los inmigrantes.