Un informe extraoficial de Salvamento Marítimo señala que “no parece” que se haya seguido los procedimientos establecidos en el rescate del cayuco, el pasado 19 de julio, a 90 millas del sur de Tenerife, en el que se logró salvar a 48 personas y otras 88 murieron.

Según el citado informe, el “Luz del Mar” se mantuvo durante seis horas custodiando el cayuco, que se había quedado sin gasolina en alta mar. Cuando llegó el “Conde de Gondomar”, éste intentó abarloarse al cayuco. Destaca que este remolcador, de 39 años, no dispone de “posicionamiento dinámico” y carece también de la capacidad de maniobra necesaria para esta operación. Asimismo, “el remolcador puede levantar gran oleaje con sus hélices y hacer volcar al cayuco”.

Los inmigrantes que denunciaron el caso declararon que este remolcador chocó con su barquilla, la partió y cayeron al mar.

El informe, al que ha tenido acceso EL DÍA, precisa que las condiciones meteorológicas en la zona no eran buenas, con viento y oleaje, a lo que hay que añadir que el incidente se produjo a la una de la madrugada y sin luz de luna (cuarto creciente).

Según los datos del Instituto Meteorológico de Canarias, en ese día y a esa hora, la fuerza del viento nordeste era de 4/5, 20 nudos y olas máximas de dos metros (la Delegación del Gobierno ha llegado a informar de que se trataba de olas de hasta 4 metros) y matiza que, “según los datos registrados en la boya al norte de Gran Canaria, en donde las condiciones meteorológicas son similares al lugar del naufragio, la altura de las olas no han superado nunca, durante el presente año, los tres metros”.

El texto apunta varias opciones de actuación, pero ninguna se aplicó. En primer lugar que, como el cayuco había navegado casi una semana, si se le hubiera abastecido de gasolina podría haber llegado a puerto sin problemas.

Otra era que el “Luz del Mar” hubiera pospuesto la operación de transbordo hasta el amanecer, con luz diurna, y haber arriado sus embarcaciones de rescate y el bote salvavidas del “Conde de Gondomar”, transbordando a los inmigrantes desde el cayuco.

También se podría haber remolcado la barquilla con la embarcación de rescate del “Luz de Mar” y dejarla atracada al costado del “Conde de Gondomar”, que tiene la borda más baja, para realizar entonces el transbordo de los inmigrantes uno a uno, como lo ha hecho la Armada, tal y como publicó este periódico. Destaca, además, que la búsqueda de los cadáveres se suspendió pronto, a las 48 horas del suceso, y que éstos afloran a las 72 horas.