El barco de crucero ‘Jules Verne’, de la compañía Vision Cruises con base en Barcelona, rescató la pasada madrugada a una treintena de inmigrantes que, tras haber naufragado, intentaban mantenerse a flote nadando en alta mar en aguas del Mediterráneo, cerca de Libia y a unas ochenta millas de Malta. Unas horas antes, el mismo barco mantuvo en custodia a un cayuco con doscientos pasajeros, entre los que se encontraban varios menores de edad, hasta que Salvamento Marítimo de la zona se hizo cargo de la situación.

Según informaron fuentes de la naviera el crucero avistó un cayuco de madrugada y acudió en su ayuda. Tras avisar a Salvamento Marítimo de la zona, mantuvo la patera en custodia para «protegerla de las inclemencias del mar o de otras circunstancias» hasta que las autoridades se hicieron cargo de ella.

Los viajeros, entre los que se contaron varios menores de edad, no fueron embarcados para evitar los problemas que se derivan de la tramitación de autorizaciones al arribar a un puerto cuando se trasladan personas sin documentación. Unas dos horas más tarde, cuando el cayuco hubo sido custodiado por Salvamento Marítimo, fueron avistados «unos treinta náufragos» que intentaban mantenerse a flote nadando en dirección a las costas maltesas, y que, inicialmente, se creía que procedían de la primera patera socorrida.

La tripulación embarcó a los náufragos y, mediante la instalación de un ‘hospital de campaña’ en la cubierta del crucero asistió a estas personas que presentaban «signos evidentes de deshidratación». Por la noche desembarcaron en Malta.