Un niño ruso está en coma, tras caerse de la cuarta planta del edificio de Amiens (Francia) donde vive con sus padres indocumentados cuando trató de bajar por los balcones siguiendo a su padre, que al parecer trataba de eludir a la Policía.

El niño, de 12 años, está en estado grave, con lesiones cerebrales de importancia, informó la Fiscalía . Los hechos ocurrieron en esa ciudad cuando policías acompañados de un intérprete acudieron al domicilio de la familia, de origen chechén y en situación irregular en Francia, para obligarla a presentarse en comisaría. El padre, de 33 años y que resultó ligeramente herido, y la madre, de 29 años, fueron trasladados también al hospital.

Según la Red de Educación Sin Fronteras (RESF), asociación de defensa de indocumentados, Iván y sus padres llegaron a Francia en 2003 y sus peticiones de asilo fueron rechazadas.