Un nuevo poblado rumano en la Cañada Real de Madrid tiene ya 40 chabolas
El Mundo, , 10-08-2007Un nuevo poblado chabolista ha crecido desde hace un año a un kilómetro de la Cañada Real Galiana, en Vallecas. La primera señal de su presencia es la media docena de críos desnudos que juegan en un camino muy transitado. Cientos de camiones de gran tonelaje pasan cada hora, sin apenas aminorar, a pocos metros de las chabolas. Ratas, ruinas y montañas de basura forman el paisaje cotidiano en el que subsisten alrededor de 40 familias rumanas de etnia gitana.
El asentamiento está situado muy cerca de la vía de servicio de la carretera de Valencia a su paso por la M – 50. Las infraviviendas se amontonan entre los restos de una antigua fábrica, al comienzo de la vieja calle de Francisco Alvarez. Esta vía, prácticamente en desuso desde la construcción de la autovía de circunvalación, constituye un atajo excelente para llegar a la incineradora y escombrera de Valdemingómez.
Los conductores evitan, de este modo, los largos atascos que se forman en la ruta habitual de la autopista. Volquetes con escombros, camiones de basura y otros vehículos de grandes proporciones pasan cada día por este punto, poniendo en peligro la integridad de los más pequeños del campamento. En febrero de 2005 ya hubo un atropello mortal en el que murió una niña.
El problema del asentamiento de la calle de Francisco Alvarez no es nuevo. Hace año y medio, las policías nacional y municipal desmantelaron la anterior versión de este poblado, situado muy cerca del actual. Hoy, la cuestión persiste con casi un centenar de nuevas chabolas. Según un portavoz de varias asociaciones de vecinos de Vallecas, «la culpa es del Ayuntamiento, que tras el anterior desalojo no tendría que haber permitido que se levantara la primera chabola». Además del peligro que supone el intenso tráfico, en los meses de verano aumenta enormemente el riesgo de incendio, en especial por los materiales con que se construyen las viviendas.
(Puede haber caducado)