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Decenas de jornaleros latinoamericanos acudieron el pasado jueves a Washington para pedir al Gobierno el fin de redadas que, dicen, están separando familias y aumentando el miedo entre los inmigrantes desde que fracasó este año una reforma migratoria en el Congreso estadounidense.

La Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras, que reúne a 65 centros de varias ciudades, organizó un acto frente al Capitolio para pedir al presidente George W. Bush que ponga un fin a las redadas y deportaciones de inmigrantes ilegales.

Gritando “No more raids (no más redadas)” y “Sí se puede”, los manifestantes pidieron que el Gobierno deje de aplicar las leyes actuales de inmigración hasta que se apruebe una reforma amplia para legalizar a los indocumentados, que se estiman en unos 12 millones.

“Queremos protección a los trabajadores, no importa si son legales o ilegales”, dijo Salvador Reza, del sindicato de Jornaleros de Phoenix, Arizona. “Paren las redadas y hagan una reforma migratoria justa”, agregó.

Ecuatorianos deportados
En tanto, ayer llegaron 34 inmigrantes ecuatorianos, de un total de 67, quienes fueron detenidos el pasado 3 de mayo al cruzar la frontera en Nogales, en EE.UU.
La Fuerza Aérea de EE.UU. puso a disposición un avión para el traslado del grupo.

Durante el tiempo que estaban detenidos, los inmigrantes indocumentados permanecieron bajo la custodia de las autoridades federales de Arizona y recibieron asistencia de la Defensoría del Pueblo, a través de su comisionado en México, indica esta entidad en un comunicado. Los 33 restantes serán deportados en otro vuelo.