Cerca de 90 inmigrantes que intentaban alcanzar las Islas Canarias podrían haber muerto, ya que, según los supervivientes de la precaria embarcación que volcó en la noche del jueves, en ella viajaban unas 135 personas.

La búsqueda de los inmigrantes africanos se suspendió ayer, puesto que ya no hay esperanzas de encontrarlos con vida, informó Salvamento Marítimo. Sólo se pudieron recuperar tres cadáveres.

Las autoridades temen que sean casi 90, y no 50, como se pensaba, las personas que murieron en aguas del Atlántico. Entre ellas, habría dos mujeres y un niño. En total, 48 personas fueron rescatadas cuando volcó el cayuco.

Los supervivientes del naufragio señalaron que los inmigrantes procedían mayoritariamente de Liberia, Ghana y Gambia. También dijeron que el cayuco partió de Guinea Bissau y que la travesía había durado diez días.

El cayuco, que pretendía llegar a Canarias para entrar ilegalmente en territorio español, volcó en la madrugada del jueves a causa de las fuertes olas y el mal estado del mar, cuando dos barcos de Salvamento Marítimo procedían a rescatarles.

Llegan 70 a Cádiz

La Guardia Civil interceptó ayer sobre las 08.30 horas a una patera con 70 inmigrantes en la playa de Hierbabuena, en Barbate (Cádiz). Tres patrullas del instituto armado y dos de la Policía Local continuaban a las 11.00 horas las labores de búsqueda de los inmigrantes, ya que algunos «echaron a correr por el monte», informó el servicio de emergencias 112.

Protección Civil tiene activado un operativo para atender a los inmigrantes, en el caso de que hiciera falta. Por el momento, se desconoce la procedencia ni la edad de los ocupantes de la patera.