Conforme pasan las horas, Salvamento Marítimo se muestras más pesimista respecto a la suerte que hayan poodico correr ele medfio centenar de indicumentados, que desaparecieron el jueves en el mar tras el vuelco de un cayuco a 90 millas al sur de Tenerife. El jueves por la noche rescarton los cadáveres de tres inmigrantes en la zona.

De la misma opinión pesimista era la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, quien señaló que los 48 inmigrantes rescatados con vida están siendo atendidos con todos los recursos disponibles. Según comentó, se encuentran en la situación propia de estar 8 o 10 días en el mar en malas condiciones, pero parece que no peligra la vida de ninguno de ellos.

Rumí destacó que continúa todo el operativo con «todos los medios necesarios para seguir trabajando durante las próximas horas», con «disposición máxima y tensión, como corresponde a una tragedia de esta envergadura».

Eso sí, reconoció que las expectativas de encontrar supervivientes son «menores conforme va pasando el tiempo, teniendo en cuenta la temperatura del agua, que hay fuerte oleaje y las condiciones del mar son muy malas».

Acerca de las declaraciones del presidente de Canarias, Paulino Rivero, quien dijo que toda la responsabilidad de lo sucedido es del Gobierno central, Rumí recalcó que «usar la inmigración políticamente es completamente ruin».

Perdidos

Por su parte, uno de los 36 inmigrantes rescatados del naufragio de un cayuco a 98 millas de Tenerife ha preguntado por sus cinco hermanos y por ocho amigos, que al parecer, iban en la misma embarcación, dijo ayer Austin Taylor, coordinador de los Equipos de Intervención Rápida de Emergencias (EIRE) de Cruz Roja.

Este inmigrante llegó ayer al puerto tinerfeño de Los Cristianos a bordo de la embarcación de Salvamento Marítimo Luz de Mar junto a otras 35 personas rescatadas del naufragio, del que han sido rescatadas con vida otras doce personas, que estaba previsto que llegarán ayer en la Code de Gondomar de Salvamento Marítimo .

La mayoría de los inmigrantes son «anglófonos», por lo que «podría hablarse de que son ciudadanos de Ghana o Gambia» y al parecer habían salido de Guinea Bissau, según las primeras declaraciones.