La alcaldesa asegura que la desaparición del campamento ha sido una labor “humana” “Hemos realizado una actuación seria y humana. Fueron las primeras palabras de la alcaldesa Rita Barberá ayer, al responder a la pregunta de cómo se había tratado al centenar de inmigrantes que dormían hasta ahora en el viejo cauce, bajo el puente de las Glorias Valencianas

A renglón seguido, cargó (sin identificarlos) contra aquellos que convencieron el primer día a dos decenas de personas para que no fueran a un albergue.

“Hemos visto como a alguien le interesaba que no diéramos alojamiento.” Subrayó que alguien quiere que los inmigrantes permanezcan en el cauce y se preguntó en voz alta el motivo. El campamento que ha permanecido durante años en el cauce ha recibido la ayuda de varias entidades de solidaridad.

Estos grupos se han mostrado precisamente críticos con la labor del Ayuntamiento y la Conselleria de Bienestar Social, para pedir un centro de acogida de inmigrantes . Por el contrario, el gobierno municipal dispuso para el desalojo del cauce de un centenar de plazas en albergues y hostales, por tiempo indefinido según subrayó la concejala de Servicios Sociales, Marta Torrado.

La alcaldesa dijo que la actuación de los servicios municipales ha sido “muy humana, muy seria y muy clara”, al tiempo que sostuvo que “las actuaciones que se hacen con transparencia, con realismo y con verdad, ponen de manifiesto cosas” y que con ellas “salen las realidades”.

Citó como ejemplo la subestación eléctrica de Patraix, donde tras el cierre de la planta, según dijo, se ha visto “quién tenía las responsabilidades”. Indicó que “decíamos que era Red Eléctrica Española” y apuntó que “cuando ha ocurrido algo, ha salido quién tenía la responsabilidad”.

Barberá señaló, respecto al desalojo debajo del puente, que se ha visto de una manera clara que “a ‘alguien’ le interesaba que no les diéramos alojamiento a los inmigrantes ”.

Recordó que los técnicos fueron “con un notario” y “con toda clase de proximidad, cercanía y asistencia” para atender a los inmigrantes que dormían a la intemperie. El segundo levantaba un acta notarial en caso de que cada persona atendida rechazara ir a un albergue.

Entonces se encontraron “con un determinado personaje que hacía bajar del autobús a los inmigrantes que habían aceptado su alojamiento” porque “querían tenerlos bajo del puente”.

Por su parte, desde la Mesa d’entitats de solidaritat amb els inmigrants, negaron cualquier maniobra para evitar que los inmigrantes acudan a los albergues, y aseguraron que se está trabajando para “ayudarlos a que vayan” a estos lugares.

Lola Duato, miembro de esta entidad, arremetió contra las declaraciones “desafortunadas” de la alcaldesa, al asegurar que sólo buscan “desacreditar a las ONG”, y tendió la mano al Ayuntamiento para buscar una solución a este problema.