El número de inmigrantes afiliados a la Seguridad Social sobrepasó en junio, por primera vez, los dos millones de ocupados, al contabilizarse el último día del mes 2.034.750 trabajadores; de ellos, 197.799 habían creado su propio negocio y convertido en autónomos. En datos relativos, la mano de obra extranjera supone el 10,2% del total de afiliados. Las autonomías más atractivas para este colectivo son Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana que absorben el 56,26% de los trabajadores llegados de fuera.

Los datos figuran en un informe publicado ayer por el Ministerio de Trabajo, que refleja una detallada radiografía de la Seguridad Social. En un año (siempre junio sobre junio) la cifra de afiliados inmigrantes creció en el Estado un 8,84%. Sin embargo, hubo comunidades en las que el aumento se disparó. En Castilla y León, el incremento se elevó al 25,09%. También destacaron Aragón, con un 21,37% y Cantabria, con un 20,78%.

En el País Vasco, los afiliados al finalizar el mes eran 45.858, cifra superior en un 16,5% a la del mismo mes del año anterior, crecimiento que duplica la media nacional. De ellos, dos tercios procedían de la países no comunitarios, con Colombia y Ecuador a la cabeza, y el resto, de la Unión.